La cocina del colegio Andres Segovia de Ciempozuelos, en Madrid, no ha dejado de funcionar con la llegada del verano. 48 niños de entre 3 y 12 años seguirán comiendo aquí hasta la vuelta al cole en septiembre. "Una medida destinada a aquellas familias que están pasando por situaciones de riesgo social", explica Ana Sánchez, técnica en educación.
Pese a la decisión del presidente de la Comunidad de Madrid de no abrir los comedores durante el verano, este Ayuntamiento ha decidido destinar una partida económica para mantener el centro abierto. Los beneficiarios son los niños que ya disfrutasen de la beca comedor durante el curso.
Además compartirán plato con los niños que están de campamento de verano, el objetivo dicen es no diferenciar entre unos y otros, y que todos juntos disfruten cada día de un buen plato de comida.