El Govern de la Generalitat ha declarado la emergencia por sequía, una situación sin precedentes, que tendrá efecto a partir de mañana viernes, y que afectará a 6 millones de catalanes de áreas de Barcelona y Girona, cuyo consumo quedará limitado a un máximo de 200 litros por habitante y día.

Así lo han anunciado en rueda de prensa tras la comisión interdepartamental de sequía el propio presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el conseller de Acció Climàtica, David Mascort.

Aragonès ha reclamado a la ciudadanía y las empresas un esfuerzo complementario para hacer frente a "la peor sequía del último siglo", y ha lamentado que Cataluña no había afrontado nunca una sequía tan larga ni de tanta intensidad.

El presidente catalán ha asegurado que en esta legislatura se ha hecho "un esfuerzo extraordinario en la activación de mecanismos" para paliar la sequía, y ha agradecido a la ciudadanía, los ayuntamientos y el tejido productivo los esfuerzos que han hecho hasta ahora.

Estas son todas las medidas implantadas en Cataluña por la crisis de la sequía:

  • Reducción en actividades económicas y agrícolas: en la fase de emergencia, se reduce en un 80% el riego agrícola, en un 50% el de ganadería y en un 25% el industrial, el mismo porcentaje que se aplica para usos recreativos.
  • Limpieza: para la limpieza de espacios urbanos, queda prohibido el uso de agua potable, salvo si es para un accidente o incendio, pero sí que se permite el uso de agua regenerada o freática. Tampoco se puede lavar el coche excepto en establecimientos dedicados a esta actividad, que tienen circuitos de recirculación de agua.
  • Prohibición de rellenar piscinas: queda prohibido el llenado total o parcial de todo tipo de piscinas, lo que incluye a las de hoteles y campings, aunque en las fases de emergencia I y II habrá excepciones. Así, se permitirá el relleno parcial de las piscinas cubiertas inscritas en el censo de equipamientos deportivos de la Generalitat y de las piscinas descubiertas de uso durante todo el año para la práctica deportiva federada si disponen de un sistema de recirculación del agua, en las cantidades indispensables para garantizar la calidad sanitaria. Para ahorrar un volumen de agua equivalente al empleado en el llenado de la piscina, en la fase de emergencia II se cerrarán las duchas. También se podrán llenar y rellenar las piscinas de uso terapéutico de hospitales, residencias y centros de educación especial, y centros de la Red de Servicios Sociales de Atención Pública, así como las piscinas para el baño de personas con un grado de discapacidad en la que conste que sufren alteraciones de la conducta.
  • Piscinas con agua de mar: se podrán llenar total o parcialmente siempre que se llenen y se vacíen sin conexión a las redes de abastecimiento ni saneamiento. Esta es la fórmula que quieren emplear los campings catalanes de cara al verano.
  • Riego restringido: está prohibido el uso de agua para el riego de jardines y zonas verdes, tanto privadas como públicas, excepto si es para la supervivencia del arbolado o jardines botánicos públicos (en fases I y II) siempre que se haga con aguas regeneradas o freáticas, como ya hace el Ayuntamiento de Barcelona. En caso de llegar a la fase de emergencia III, el riego con agua no potable sólo se permitirá para la supervivencia de árboles de carácter singular o monumental.
  • Moratoria para nuevas actividades: el Govern ha aplicado una moratoria para nuevas actividades económicas que requieran un uso intensivo del agua como granjas nuevas o ampliación de las existentes, industrias o actividades turísticas y nuevos planes urbanísticos.
  • Modificación de caudales mínimos: el Ejecutivo catalán también ha aprobado modificaciones en los caudales mínimos en los ríos Muga, Ter y Llobregat, con el objetivo de preservar más agua en los embalses, una medida que los grupos ecologistas han llevado a la Fiscalía al considerar que supone un daño a la biodiversidad.
  • Barcos de agua: mantienen sobre la mesa la posibilidad de contratar barcos cargados de agua que la lleven hasta el Puerto de Barcelona. El Govern baraja diversas opciones, entre ellas Tarragona (donde la escasez hídrica no es tan extrema pues se alimenta del Ebro) o de otros puntos de España donde hay desalinizadoras, pero en todo caso el plan está previsto para fases más avanzadas de la emergencia, en primavera.