Así lo han puesto de
manifiesto responsables del Seprona, de Europol y de la Secretaría General de
Pesca en una rueda de prensa para dar cuenta de los detalles de la operación
Tarentelo contra la comercialización ilegal de atún rojo y denominada así
porque así se llama una parte del vientre de este pez.
El teniente coronel jefe
de Operaciones del Seprona, Jesús Gálvez, ha explicado que la operación comenzó
en el primer semestre de 2017 tras las informaciones de la Secretaría de Pesca
y del sector de que se podría estar pescando ilegalmente atún en el
Mediterráneo.
Tras diversas pesquisas
se descubrió una red asentada en la Comunidad Valenciana, y la Fiscalía de
Medio Ambiente junto con el Juzgado número 3 de Picassent abrieron diligencias
para descubrir la trama, en una operación que culminó con 79 detenidos (todos
españoles) y casi 50 registros de empresas distribuidoras y domicilios.
La operación se ha
llevado a cabo en doce provincias: Barcelona, Castellón, Valencia, Alicante,
Murcia, Almería, Málaga, Cádiz, Sevilla, Huelva, Toledo y Madrid. Durante la
explotación de la misma se han intervenido 80.000 kilogramos de atún rojo,
cerca de medio millón de euros en efectivo, vehículos de alta gama y joyas
valoradas en más de 600.000 euros y documentación que se está analizando y que
corresponde a la actividad del grupo en los últimos tres años.