Tras las nevadas y heladas de estos días, lo que preocupa ahora es el riesgo de aludes, porque el cocktail que tenemos ahora encima es perfecto para que sucedan: paquetones de nieve reciente, subida de temperaturas, viento y precipitaciones que provocarán deshielos.

La AEMET avisa de este riesgo a Cantabria, Burgos, Huesca y Navarra. Especialmente, están en alerta los Picos de Europa y las carreteras de Sotres San Isidro y Somiedo, que están cerradas por el mismo motivo.

Aún así, ya se han producido los primeros sustos. Dos jóvenes que subían en coche a Riaño, en León, tuvieron que ser rescatados en la noche de este jueves por la Guardia Civil porque quedaron atrapados por la nieve que caía del monte y que tenía un grosor de unos 50 centímetros.

Este viernes, otro alud ha caído a plomo sobre esta carretera en Portilla de la Reina, también en León. Casi metro y medio de nieve que ha dejado inhabilitada la carretera.

Hace solo dos días, en Baqueira, tuvieron que rescatar a dos esquiadores que estuvieron sepultados bajo la nieve durante una hora. Los dos esquiadores fueron localizados heridos pero conscientes y fueron evacuados al hospital, después de que ellos mismos alertasen al servicio de emergencias de la estación.

Verse arrastrado por una lengua de nieve es, como poco, angustioso. Para solventar una situación así con mayor seguridad es fundamental llevar encima un equipo esencial de rescate, que consta de una pala, una sonda y un dva, un dispositivo que facilita a los servicios de emergencias encontrarnos.