Dos incendios declarados en la provincia de Guadalajara, uno iniciado el jueves en la localidad de Cogolludo y otro en Bustares el viernes, han arrasado ya más de 600 hectáreas y han obligado a desalojar a 180 personas este viernes.
El delegado de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Guadalajara José Luis Condado ha confirmado los desalojos debido a los dos incendios, que han entrado en territorio incluido en el Parque Natural de la Sierra Norte.
El fuego de Bustares ya ha calcinado 200 hectáreas de prado y monte bajo y ha llegado a las faldas del Monte del Alto Rey, un paraje muy agreste y de difícil acceso.
Por su parte, el incendio que comenzó el jueves en Aleas, una pedanía del municipio de Cogolludo, ha obligado a evacuar a 40 personas.
Este fuego se dio por controlado en la tarde de ayer tras quemar 400 hectáreas de terreno, pero hoy se ha reavivado y ha avanzado hasta entrar en el Parque Natural de la Sierra Norte, tras calcinar otras 200 hectáreas.
Condado ha explicado que las condiciones climatológicas son "extraordinariamente adversas" con temperaturas por encima de 35 grados, vientos entre 40 y 50 kilómetros hora y una humedad relativa muy baja, que dificultan mucho las tareas de extinción.
Lla Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha ha decretado el nivel de "alerta regional", debido a que se ha activado el nivel 2 de estos incendios y a que se han detectado otros tres incendios menores en la provincia.
A media tarde trabajaban en el incendio de Bustares 13 medios terrestres, 9 medios aéreos y bomberos del Consorcio Provincial de la Diputación de Guadalajara, que sumaban 104 personas.
Está prevista la incorporación de personal de la Unidad Militar de Emergencia para colaborar en las tareas de extinción procedentes de Torrejón de Ardoz (Madrid). El delegado ha confirmado que "tareas agrícolas en un colmenar" han sido la causa de este incendio.
Según el delegado, un total de 106 personas trabajan en las labores de extinción de este incendio.