El ministro de Educación, José Ignacio Wert, calcula que el nuevo modelo universitario supondrá para las familias un ahorro de unos 150 millones de euros, que es lo que cuestan las tasas de un año, al poderse reducir a tres años la duración de los grados.
"Se trata de una medida que busca la alineación con los países más importantes de nuestro entorno", ha recalcado Wert, que ha explicado que, además, quienes superen un grado de tres años anticiparán un año "su posible incorporación laboral".
El ministro ha subrayado que el contenido de este real decreto no es ninguna "imposición" ya que las universidades optarán voluntariamente por implantar grados de tres años o másteres de dos años y ellas decidirán cuándo hacerlo.