La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado un relajamiento de las medidas antiCOVID que aún siguen vigentes en la autonomía este lunes durante un acto en Milán. Desde el 20 de septiembre, Madrid dará libertad horaria para hostelería y ocio nocturno. También dejará de haber restricciones de aforo en cines y teatros y se ampliará de 8 a 10 los comensales en terrazas.

Ayuso, que ha recibido el premio Llama de la Libertad, concedido por el Instituto Bruno Leoni, venía de lamentar durante esa misma intervención los "auténticos destrozos" que el miedo ha causado durante la pandemia del COVID. "¡Cuántas normas absurdas y daño gratuito han causado las decisiones basadas en el miedo de algunos políticos y empresarios!", ha indicado la presidenta.

La dirigente madrileña, que ha explicado los detalles de cómo se actuó en Madrid, también ha señalado que estas decisiones se tomaron "sin importar las cifras que demuestran que los cierres indiscriminados no mejoran la evolución del virus" y que "cerrar ha de ser la última decisión después de intentarlo todo".

"Qué fácil decidir sobre el trabajo del autónomo con un sueldo público"

"Qué miedo a perder poder... Y qué fácil, con un sueldo público, decidir sobre el trabajo del autónomo", ha continuado la presidenta madrileña, quien ha defendido que la "libertad es el bien más preciado que tiene el hombre" y que es "nuestra obligación demostrar que la libertad no es gratis". "Y allá donde sea violentada debemos defenderla, dentro y fuera de nuestras fronteras", ha apostillado.

Díaz Ayuso ha expuesto el ejemplo de Madrid, que "fue la primera en tomar decisiones contra el virus, empezando por la más difícil que un gobernante puede imaginar: cerrar todos los colegios por primera vez en nuestra historia". También ha recordado los aviones de material sanitario y del mando único de sanidad.

También ha destacado que la Comunidad fue pionera en construir "un hospital alabado por la Organización Mundial de la Salud y la Comisión Europea", en referencia a IFEMA, con 1.200 profesionales y atendió a 4.000 pacientes y la construcción posterior del Enfermera Isabel Zendal, que ha curado a estas alturas a 8.000 pacientes y ha administrado 1 millón y medio de vacunas.

"Cerrar es un fracaso"

La presidenta ha insistido en que, gracias a la detección precoz, "en lugar de confinamientos indiscriminados", se crearon zonas básicas de salud donde el Gobierno autonómico realizó cribados masivos.

"Pero sobre todo decidimos que cerrar, lo que es un fracaso, ha de ser siempre la última opción una vez intentado todo. La administración que directamente ha optado por cerrar sin intentar alternativas creativas no puede publicitarse como responsable", ha manifestado.