Nuevos ministros, nueva vida. Si algo ha quedado claro tras la remodelación que ha llevado Pedro Sánchez a cabo en su equipo es que el cisma que se vivía en el seno del Gobierno de España no era el que se escenificaba de puertas para afuera. El PSOE se ha renovado, sí, pero Unidas Podemos no ha visto reducida su influencia ni un ápice.

La verdadera lucha que ha acabado con Calvo, Ábalos e Iván Redondo orillados, lejos de la Moncloa, se vivía en clave interna: la pugna por el poder que protagonizaba la gente del PSOE, de vida orgánica, de militancia socialista, y el verdadero gurú, Redondo, que ejercía de consejero áulico y cuya leyenda y figura superaban sus funciones reales.

Eso se ha dejado ver en los traspasos de cartera que se han escenificado este lunes. Por ejemplo, en el Ministerio de Presidencia, que ostentaba hasta ahora Carmen Calvo y que dirigirá a partir de este momento Félix Bolaños, un auténtico fontanero en la sombra de Moncloa y hombre de la máxima confianza de Pedro Sánchez.

Bolaños, de la máxima confianza de Sánchez

Las veces que he pensado y me he alegrado de no ser ministro. ¡Unas cuantas!”, ha sonreído Bolaños en su alocución posterior al traspaso de carteras, con la práctica totalidad de ministros entrantes y salientes presentes en la sala, de ambos partido que conforman la coalición, que han roto a reír. “Pero estas cosas”, ha insistido, “ni se deben pedir, ni se pueden rechazar. Al final el presidente ha decidido que asuma esta cartera, y lo hago como un honor y una enorme responsabilidad”, ha declarado el nuevo ministro.

Todas las cejas se han arqueado en ese momento. Precisamente, tras las últimas informaciones periodísticas conocidas sobre la salida de Iván Redondo, tras haberle pedido a Sánchez ser él el nuevo ministro de Presidencia, aunque desde su entorno niegan este extremo. Todos los presentes, según ha podido atestiguar laSexta, así lo han interpretado.

Sin embargo, fuentes cercanas al nuevo ministro Bolaños niegan que con esa frase “polémica” se dirigiera a Redondo, sino que se expresaba a título particular. También señalan que le desea “lo mejor” al anterior jefe de gabinete, que dejaba caer en una nota manuscrita que hizo llegar a los medios de comunicación en que abandonaba el Gobierno por voluntad propia.

Ábalos ni siquiera menciona a Sánchez

La salida de Carmen Calvo no es la única que ha causado perplejidad. En más de un traspaso de carteras la tristeza y el agridulzor se han hecho patentes. Por ejemplo, en la toma de posesión del Ministerio de Transportes. Tanto, que Ábalos, que otrora fuera parte del núcleo más duro del presidente del Gobierno, ni siquiera ha mentado a Sánchez en ningún momento de su intervención. Ni un gesto, ni una alusión.

"Solamente me queda orgullo de haber formado parte del Gobierno de España. No de un Gobierno, sino al servicio de España", ha comentado, separándose aún más de la figura de Pedro Sánchez.

Ábalos no sólo era ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, también era secretario de Organización del PSOE. De este otro cargo del que renunciará en los próximos días.

Juan Carlos Campo, amortizado tras los indultos

Otro de los hombres más mediáticos del Consejo de Ministros de los últimos tiempos, el ya extitular de Justicia, Juan Carlos Campo, tampoco ha nombrado al presidente del Gobierno. Tras haber pilotado toda la campaña de los indultos, Sánchez ya lo ha dado por amortizado.

Así, en su intervención de despedida, Campo ha dado la bienvenida a Pilar Llop al ministerio y ha recordado los trabajos que deja sobre la mesa, entre ellos el macro-proyecto Justicia 2030. Campo, que ha recibido un largo aplauso, ha agradecido el esfuerzo de su equipo pero no ha citado en ningún momento al presidente.

Laya, en un momento "agridulce"

Arancha González Laya ha sido otra de las cesadas que no ha ocultado que le hubiera gustado seguir en el Consejo de Ministros. Sin embargo, la crisis con Marruecos se la ha llevado por delante.

"Hace exactamente 546 días llegaba a España y me ponía al servicio de los españoles tras más de 20 años de servicio público internacional. Hoy dejo el puesto, pero me mantengo firme en mi vocación de servicio público", ha afirmado en su despedida.