Según han informado
fuentes jurídicas, la defensa de Bárcenas presentó un escrito
solicitando personarse como acusación particular en la causa la pasada semana
por entender que habría sido perjudicado en ese operativo policial con el que
se habría captado con dinero público al que fuera su chófer para que le
sustrajera los documentos.
Kitchen es la séptima
pieza del llamado caso Tándem por el que se investigan las actividades
presuntamente delictivas del comisario jubilado José Manuel Villarejo, quien se
encuentra en prision provisional desde noviembre de 2017 sospechoso, entre
otros delitos, de organización criminal, cohecho, blanqueo y extorsión.
La investigación sobre
la operación Kitchen se incorporó a la causa, parcialmente secreta, cuando
parte de la documentación intervenida a Villarejo reveló indicios de que a
partir del año 2013 estuvo pagando 2.000 euros al mes, provenientes de fondos
reservados, al entonces chófer de Bárcenas y su esposa en calidad de confidente
para hacerse con la documentación que podría haber conservado el extesorero
tras su despido del PP.
Este operativo está
siendo investigado por el magistrado de refuerzo del Juzgado Central de
Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional. No obstante, otro juez de este
mismo tribunal, José de la Mata, se ha interesado por el caso, ya que en su
caso está investigando la presunta financiación irregular del PP, por lo que
tiene interés en conocer los documentos que en su día pudieran habérsele
sustraído al extesorero.
Así, de este modo,
Bárcenas y su mujer, Rosalia Iglesias, están citados a declarar en calidad de
investigados ante el juez De la Mata el próximo viernes, 21 de diciembre, para
que aclaren cuál era esa información que les fue sustraída.