La Fiscalía alemana sospecha que Christian Brückner, el presunto asesino de Madeleine McCann, la niña de tres años desaparecida en 2007 en el Algarve portugués, podría estar detrás de al menos seis casos de desapariciones de menores, violaciones o asesinatos en Europa.

A pesar de que la Policía portuguesa no se acaba de creer la investigación de la Fiscalía y la Policía alemana que lleva en coordinación con Scotland Yard, están apareciendo informaciones confirmadas por la prensa internacional respecto a cómo se han desempolvado numerosos casos que incriminarían a Christian Brückner con expedientes por resolver. Y es que hay al menos seis víctimas que llevaría el sello del presunto asesino de Madeleine, según señala Carlos Quílez.

Es el caso de Inga Gehricke, una niña alemana de cinco años que desapareció en el estado federado de Sajonia-Anhalt -este del país- en primavera de 2015, durante una excursión con su familia. La pequeña fue a recoger leña con otros niños cuando desapareció y nunca se supo de su paradero. Christian Brückner se encontraba por esas fechas cerca del bosque donde se vio a la niña por última vez, en una cabaña a 90 kilómetros de distancia del lugar. El presunto asesino de McCann fue registrado un año después por la Policía que encontró un USB que contenía pornografía infantil pero ningún rastro de Inga.

En el año 2001, Peggy Knobloch, una niña de seis años que desapareció en un bosque de Baviera, Alemania, cuando regresaba a su casa desde la escuela. La menor fue secuestrada y asesinada seis años antes de la desaparición de Madeleine. Ahora, la Policía alemana investiga si su asesinato tiene conexión con Brückner.

En el año 2004, Behan, una joven irlandesa fue violada por un individuo que irrumpió con un pasamontañas y un cuchillo en su apartamento en la localidad portuguesa de Praia da Rocha, donde trabajaba por aquel entonces y que está situada a unos 30 minutos en coche de Praia da Luz, el lugar donde McCann desapareció sin dejar rastro en 2007. El individuo la llamó por su nombre y la violó. Aunque el agresor nunca fue capturado, Behan cree que podría ser Christian Brückner. De confirmarse que él fue el agresor, esta no sería la primera violación que comete ya que fue condenado recientemente por la violación de una mujer estadounidense de 72 años cometida en 2005 en Praia da Luz.

En 2002, Joana Cipriano, una niña de ocho años, desapareció en el Algarve portugués donde ya vivía el alemán. En concreto en Figueira, cerca de donde Madeleine fue secuestrada años después. Además, la investigación fue dirigida por Gonçalo Amaral, el mismo detective que dirigió la investigación fallida sobre la desaparición de Madeleine. Su cuerpo nunca fue encontrado.

Caroline Titze fue hallada muerta en julio de 1996 en la costa belga. La joven de 16 años al parecer salió de una discoteca en la zona donde veraneaba con sus padres con un hombre alemán, rubio, de las características de Christian Brückner.

Por último, la huella del presunto asesino de Maddie podría estar también tras la desaparición de Renee Hasee, en junio de 1996. El niño tenía seis años cuando se perdió su rastro durante unas vacaciones en el Algarve. No había pruebas que vincularan a Brückner y nunca fue acusado.

Brückner, el violador alemán que presuntamente asesinó a Maddie

Christian Brückner es un hombre alemán de 43 años al que las autoridades británicas acaban de nombrar principal sospechoso de Madeleine y que en la actualidad cumple condena en una prisión de Alemania.

Con un amplio historial delictivo por violencia sexual que incluye a víctimas menores, Brückner vivió en el Algarve entre 1995 y 2007, y, precisamente el día de la desaparición de Madeleine estaba cerca de la casa de Praia da Luz, donde los McCann pasaban las vacaciones.