La medida, propuesta por el Consejo de Estado -máximo órgano decisorio del país-, se tomó por "la situación excepcional" provocada por el paso del huracán Irma en septiembre pasado, que dejó en la isla diez muertos y millonarios daños materiales.

La primera etapa del proceso electoral, los comicios municipales fijados para octubre, ya había sido pospuesta un mes por el mismo motivo.

De acuerdo a la Constitución cubana, una legislatura solo puede extenderse "por acuerdo de la propia Asamblea en caso de guerra o en virtud de otras circunstancias excepcionales que impidan la celebración normal de las elecciones y mientras subsistan tales circunstancias".

Según lo aprobado hoy por la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento unicameral) en su segundo y último pleno del año y de la octava legislatura, la vigencia de las actuales asambleas provinciales del Poder Popular también se extiende, en este caso hasta el 25 de marzo, según un informe de la estatal Agencia Cubana de Noticias.

Las próximas elecciones generales cubanas suscitan un gran interés, ya que la próxima legislatura será la primera ocasión en seis décadas que la presidencia de Cuba no estará ocupada por un mandatario apellidado Castro, tras más de 40 años de Gobierno de Fidel Castro, sucedido en 2006 y hasta la fecha por su hermano menor, Raúl, de 86 años.

El proceso electoral, que incluye la celebración sucesiva de comicios municipales, regionales y generales, comenzó el 26 de noviembre con la elección de los delegados municipales del Poder Popular (concejales), en la que participaron 7,6 millones de personas, según datos oficiales.

De cara a ese proceso municipal se había constituido la plataforma ciudadana #Otro18, que por primera vez intentó presentar candidatos independientes, aunque finalmente no lo logró.

De entre los delegados elegidos en ese primer proceso saldrá parte de los candidatos a diputados de la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral) en las elecciones generales, aún sin fecha, y el nuevo Parlamento que resulte electo ratificará el 19 de abril al nuevo presidente de Cuba.

Aunque no se ha confirmado oficialmente, se prevé que el relevo de Raúl Castro sea el actual primer vicepresidente, Miguel Díaz-Canel.

La ley electoral cubana establece que el presidente, junto con el vicepresidente y los restantes miembros del Consejo de Estado, se eligen a partir de una propuesta elaborada por una Comisión de Candidaturas integrada por diputados electos en los comicios generales, que es sometida a votación en el Parlamento.