Un niño de ocho años ha sido cazado por la policía de Estados Unidos, mientras conducía un coche junto a sus dos hermanos de cinco y dos años. El momento en el que los pequeños circulaban por el vecindario fue captado por la cámara de un coche patrulla. Los niños iban vestidos con pijamas y sus mochilas. Un agente los sacó del vehículo y los devolvió a su familia de acogida.