Fuentes sanitarias han informado de que el estado general del pequeño es "estable" y se ha confirmado el diagnóstico de parálisis cerebral de origen genético, por lo que no requiere cuidados hospitalarios.

A partir de ahora, se llevarán a cabo diferentes acciones para mejorar su calidad de vida fuera del centro sanitario, como es habitual en este tipo de pacientes.

Durante su estancia en La Fe le han visitado especialistas en Pediatría, Enfermedades Infecciosas, Neuropediatría, Nutrición, Genética, Traumatología pediátrica y Rehabilitación.

Además, se le han realizado distintas pruebas en el área de Radiodiagnóstico y Análisis Clínicos, coordinados por la responsable de la Unidad de Atención al Niño Internacional de La Fe, Gemma Ochando.

Los hermanos de Osman, Yamil y Monir, de ocho y nueve años, también han sido atendidos en esta misma unidad y su estado general es "bueno". Se está llevando a cabo el control de vacunación y continuarán el seguimiento en consultas externas de La Fe y en su centro de salud.

Los padres del niño afgano también han sido atendidos por especialistas del Servicio de Medicina Interna y se encuentran bien. Posteriormente, tendrán seguimiento en consultas externas para finalizar el estudio con otras exploraciones complementarias.