Save The Children será investigado por su respuesta a acusaciones de mala conducta sexual y hostigamiento contra altos funcionarios, según ha informado el organismo de vigilancia de la caridad de Reino Unido tras un importante escándalo de abuso sexual que envolvió al sector de ayuda global.
La Comisión de Caridad ha asegurado que la investigación se centraría en el manejo de denuncias de la organización benéfica, como las realizadas contra el expresidente ejecuivo Justin Forsyth y el exjefe de política Brendan Cox.
El organismo de control examinará cómo se trataron las acusaciones de mala conducta en 2012 y 2015 y si se divulgaron por completo al organismo que regula las organizaciones benéficas en Inglaterra y Gales.
"Tenemos preguntas que deben ser contestadas y tenemos que responsabilizar formalmente a la institución de caridad por proporcionarlas de manera clara y oportuna", ha señalado Michelle Russell, directora de investigaciones y aplicación de la Comisión de Caridad. Save the Children y su exejecutivo Forsyth se disculparon en febrero por su comportamiento inapropiado hacia el personal femenino y la organización aseguró que los procedimientos no se habían conseguido adecuadamente al revisar tres quejas en su contra.
Mientras tanto, Cox admitió que cometió errores y que se comportó de una manera que causó daños y ofensa a algunas mujeres cuando trabajaba en Save the Children. Dimitió en septiembre de 2015. La organización de ayuda internacional afirmó en un comunicado que cooperaría con la investigación de la Comisión de Caridad.
"Nos comprometemos a trabajar con la Comisión de Caridad para establecer una descripción veraz y precisa de los eventos y la respuesta de la organización benéfica", afirmó Peter Bennett Jones, presidente de la junta de fideicomisarios de Reino Unido de Save the Children. "Si se cometieron errores, actuaremos de manera rápida y decisiva para abordarlos", aseveró.