El experto en Salud Pública Rafael Bengoa ha pedido un control "más estricto" de viajeros procedentes de China ante la previsión de un "brutal" número de contagios por la celebración del Año Nuevo chino, que se desarrolla a partir del próximo día 22 de este mes de enero y en el que están previstos millones de desplazamientos.

Con todo, Bengoa ha lanzado un mensaje de tranquilidad al asegurar que se trata de "sublinajes de ómicron", que son "muy infecciosos, pero igual de no severos que en nuestro contexto".

En declaraciones a Europa Press, el también exconsejero vasco de Salud ha criticado que el gigante asiático, "después de mil días de confinamiento", haya decidido "soltar" la política de cero covid "sin haber preparado la salida", en contraposición de países como Nueva Zelanda o Australia que, antes "de romper el dique" de la política de cero covid, lo que hicieron fue "vacunar, vacunar, vacunar, y también asegurar que tienen la infraestructura del sistema sanitario lista por si acaso venía una ola muy grande".

En su opinión, en el resto del mundo "nos haremos muy vulnerables si aparece otra variante, que no ha aparecido aún y que es posible que aparezca, porque realmente hay miles de personas infectándose". "Si aparece esa nueva variante entonces sí seremos más vulnerables, y por tanto nos tenemos que preparar ante esa eventualidad", ha avisado.

Lo que importa ahora, ha continuado, es que el gobierno chino, que "ha estado más bien controlando a la gente que controlando una infección", se ponga "las pilas" para frenar esa "especie de caos que se ha creado por decisiones políticas".

En cuanto a su apuesta por el endurecimiento de los controles de pasajeros chinos que viaje a Europa, el experto ha manifestado que "en términos de Salud Pública", lo que ahora conviene es ser "un poquito más estrictos y decir a la gente: 'de momento, durante dos o tres meses no vayáis a China', y los chinos que vienen con un control bastante estricto por fronteras, como ya están haciendo algunos países".

En su opinión, estos controles pasarían por una "prueba covid negativa" al salir de China, además de un control de las aguas residuales en el propio avión, "porque se puede dar la circunstancia de que alguien sea negativo al subir al avión y ser positivo durante el vuelo". Además, al aterrizar se debería realizar también un control más exhaustivo en el caso de que esa persona resultara positiva.

"Ahí, lo que conviene es recomendar a esa persona que se 'autoconfine' durante cinco días, cosa que no se ha hecho, pero yo creo que eso será algo que se hará poco a poco, porque el número de personas que se están infectando, y que se van a infectar por el Año Nuevo chino va a ser tan brutal que va a ser necesario ser más estricto en relación a la gente de China que viene por aquí", ha subrayado.