Mientras España se prepara para unas Navidades atípicas por el coronavirus, en las que no obstante se flexibilizarán algo las restricciones para permitir reuniones de hasta 10 personas o postergar el toque de queda en las fechas más señaladas, la mayoría de países de nuestro entorno se blinda de cara a las fiestas.

Alemania, Holanda o Lituania han optado por imponer cierres prácticamente totales ante el temor de que las festividades navideñas disparen los contagios, en un momento en que el continente se encuentra inmerso de lleno en la segunda ola de la pandemia.

Las fiestas que llegan, además, con el horizonte de la inminente aprobación de una vacuna en Europa, después de que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) haya adelantado ya al próximo lunes su evaluación de la de Pfizer. Repasamos cómo se preparan nuestros vecinos para una Navidad en pandemia:

Cierres 'duros': Alemania, Holanda y Lituania

Alemania -que pretende empezar a vacunar ya en Navidad si la vacuna es autorizada la semana próxima- comienza este miércoles un nuevo confinamiento 'duro': todos los comercios no esenciales permanecerán cerrados, mientras que las reuniones -también durante las fiestas- se limitarán a cinco personas.

Restricciones que entran en marcha tras registrarse un nuevo máximo de víctimas con COVID-19, con 952 fallecidos en las últimas 24 horas. Se trata de la cifra diaria más alta desde el inicio de la pandemia. Casi dobla el récord anterior, de hace una semana, que era de 598. Según datos del Instituto Robert Koch (RKI), las autoridades sanitarias contabilizaron 27.728 nuevos contagios en un día.

También este miércoles entra en vigor un confinamiento casi total en Lituania, que incluye la prohibición de viajar por el interior del país, donde los contagios han repuntado en los últimos días.

Allí todos los comercios -menos los de alimentación, farmacias, veterinarios, ópticas y ortopedias- no podrán abrir y se recomienda a la población que no abandone sus casas salvo para comprar bienes básicos. Los centros educativos funcionarán a distancia y las guarderías solo abrirán para padres que no puedan teletrabajar.

Además, aunque los convivientes pueden pasear dentro de sus municipios, sin reunirse con otras personas, se les pide que no salgan de su ciudad sin razón justificada -como trabajar, ir al médico o a funerales-, una medida que estará en vigor hasta principios de 2021.

Países Bajos: un confinamiento de cinco semanas

También Holanda entra desde este miércoles en un cierre prácticamente total que se prolongará durante cinco semanas. El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, lo anunció este mismo lunes en una comparecencia televisada, en la que se escuchaba de fondo una protesta de detractores del confinamiento (lo puedes escuchar en su tuit, bajo estas líneas).

Así, guarderías, colegios y toda la actividad no esencial estarán cerrados en Holanda, incluyendo el comercio, los gimnasios y museos, al menos hasta el 19 de enero. Además, el Gobierno ha pedido a los ciudadanos que no viajen fuera del país hasta mediados de marzo, que limiten sus salidas y restrinjan el número de invitados a sus casas a un máximo de dos personas.

La excepción a esta norma será los días 24, 25 y 26 de diciembre, coincidiendo con los festivos navideños, cuando se podrá recibir a un máximo de tres visitas al día, un límite del que quedan excluidos los niños de hasta 12 años.

Bélgica: toque de queda y sin compras "ociosas"

Ante la imposición de estas restricciones en sus países vecinos, Bélgica no descarta reforzar también las suyas, ante el temor de que alemanes y holandeses se desplacen al país limítrofe para realizar sus compras navideñas.

El primer ministro belga, Alexander de Croo, ha tratado ya este tema con Rutte y ha manifestado que su homólogo holandés y él mismo "desaconsejan encarecidamente cruzar la frontera". Las compras "ociosas", ha recordado, están prohibidas en Bélgica, donde sigue vigente un toque de queda nocturno y la hostelería permanece cerrada.

Italia estudia medidas más duras

Entretanto, la situación en Italia, uno de los países más golpeados en la primera ola, empeora por momentos: el país transalpino notificaba este martes 846 muertes por coronavirus y casi 14.000 nuevos casos en un solo día.

Ante esta situación, y tras las aglomeraciones registradas durante el pasado fin de semana, el Ejecutivo de Giuseppe Conte ya ha avanzado que estudia medidas más restrictivas de cara a la Navidad para evitar una tercera ola, aunque de momento descarta un confinamiento total.

Medios italianos adelantan ya que las nuevas medias podrían implicar una extensión del toque de queda (de momento, comienza a las 22:00 horas), nuevas restricciones de movilidad o el cierre de restaurantes durante las fiestas.

República Checa: vuelve el toque de queda y el cierre de bares

Por su parte, el Gobierno checo ha decidido volver a cerrar la hostelería, limitar los movimientos y regresar al toque de queda nocturno entre las 23:00 y las 05:00 horas, tan solo un mes después de relajar las restricciones.

Las nuevas restricciones comenzarán el viernes, aunque por el momento seguirán abiertas las tiendas y servicios. A fecha de este lunes, el país tenía una tasa de incidencia acumulada de 576 casos por cada 100.000 habitantes.

Francia: toque de queda en Fin de Año pero no en Nochebuena

Francia, aunque mantiene un número de contagios estable desde hace semanas, ha comenzado este martes una suerte de desescalada en la que no obstante mantiene un toque de queda desde las 20:00 a las 06:00 horas, que se levantará en Nochebuena pero se mantendrá en Nochevieja.

Salvo en ese horario nocturno, los franceses ya no tienen que justificar sus salidas del domicilio o los desplazamientos dentro del territorio nacional, aunque permanecen cerrados la cultura y la hostelería, al menos hasta enero. El primer ministro galo, Jean Castex, incluso ha recomendado a los franceses que se autoconfinen durante ocho días antes de las reuniones navideñas.

Reino Unido: reuniones de hasta tres hogares

En Reino Unido, Londres y algunas áreas de Essex y Hertforshire tienen desde hoy sus gimnasios, bares y restaurantes cerrados, salvo para servicio 'take away' o a domicilio. Allí, están prohibidas las reuniones sociales en espacios cerrados: solo se permiten encuentros entre no convivientes de hasta seis personas y en exteriores.

En el país británico, donde recientemente se ha detectado una nueva variante del coronavirus, las publicaciones científicas 'British Medical Journal' y 'Health Service Journal' han alertado de que relajar las medidas por Navidad puede costar "muchas vidas".

Una advertencia que lanzaban después de que se decidiera autorizar que hasta tres hogares distintos puedan viajar por el país para reunirse entre el 23 y el 27 de diciembre con motivo de las fiestas. Aunque el Gobierno de momento no va a modificar esta medida, ha pedido a la gente que reduzca los contactos sociales al "mínimo".