Fuerzas militares estadounidenses han derribado este domingo otro objeto volador a gran altitud, esta vez sobre el lago Hurón, uno de los Grandes Lagos del noreste de Estados Unidos. El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha confirmado este nuevo incidente en el que supone el tercer día consecutivo en el que se da cuenta del derribo objetos no identificados sobre Norteamérica. "Hoy a las 2.42 horas (hora local) (...) un F-16 disparó un misil AIM9x para derribar con éxito un objeto en el aire que volaba a aproximadamente 20.000 pies -unos 6.000 metros- de altitud en el espacio aéreo de Estados Unidos sobre el lago Huron en el estado de Michigan", se lee en un comunicado del Pentágono.

El Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte (CONAD) detectó el objeto este domingo por la mañana y mantuvo un seguimiento visual y de radar del mismo hasta que ha podido derribarlo sobre la península Superior de Míchigan, cuando ya no había peligro para las personas. Para ello, las autoridades estadounidenses y canadienses tuvieron que restringir los vuelos en la zona y enviaron aviones de combate para identificar el objeto. "No evaluamos que fuera una amenaza militar cinética para nada en tierra, pero evaluamos que era un peligro para la seguridad de los vuelos y una amenaza debido a sus capacidades potenciales de vigilancia. Nuestro equipo ahora trabajará para recuperar el objeto en un esfuerzo por aprender más", ha relatado el Departamento de Defensa en su misiva.

El objeto tenía forma de octógono con varias cuerdas sueltas y ningún tipo de cargamento que pudiera distinguirse, según ha informado una fuente conocedora del asunto a CNN. El derribo de este nuevo objeto tiene lugar tan solo un día después de que un caza F-22 estadounidense disparara contra otro objeto no identificado sobre el territorio del Yukón, en el oeste de Canadá, mientras que el viernes fue derribado otro objeto sobre el espacio aéreo de Alaska. Asimismo, el pasado domingo un globo espía chino fue derribado por el Ejército estadounidense sobre el Atlántico tras cruzar toda Norteamérica. Washington asegura que era un globo espía chino, pero Pekín sostiene que era un globo meteorológico que se desvió accidentalmente.

Ante esto, la secretaria adjunta de Defensa, Melissa Dalton, ha detallado que aún no ha sido posible evaluar qué son los objetos ni a qué país pertenecen. Tampoco ha sido posible detallar cómo se mantienen en el aire, porque no es seguro que sean globos aerostáticos. "El globo espía de China era, por supuesto, diferente en el sentido de que sabíamos exactamente qué era. Estos objetos más recientes no representan una amenaza militar cinética, pero su camino en la proximidad de sitios sensibles del Departamento de Defensa y la altitud a la que volaban podrían ser un peligro para la aviación civil y, por lo tanto, generaron preocupación", ha remarcado Dalton.

Este domingo el portavoz del Partido Demócrata en el Senado, Chuck Schumer, ha revelado que los dos objetos derribados el sábado y el viernes eran globos, aunque mucho más pequeños que el derribado hace una semana. "Creo que los chinos han sido sorprendidos en sus mentiras y creo que es un auténtico paso atrás para ellos", ha afirmado en declaraciones a la cadena ABC. "Probablemente van a tener que deshacerse de ello o algo así porque han quedado muy mal. Y no solo lo están haciendo en Estados Unidos. Hay toda una flota de globos. Hemos avistado uno en Sudamérica. Probablemente están por todo el mundo", ha apuntado. Schumer ha reconocido que el primer globo probablemente consiguió algunos datos de inteligencia, pero ha defendido su derribo porque ha supuesto "un gran golpe" porque Estados Unidos conseguirá información valiosa para los servicios secretos.

Reino Unido revisará su seguridad aérea

Este suceso ya ha generado las primeras reacciones políticas a nivel internacional. Reino Unido llevará a cabo una revisión de su seguridad aérea tras este reciente hallazgo. El ministro de Defensa británico, Ben Wallace, ha adelantado que su país y otros socios trabajarán de manera conjunta para emprender una revisión de seguridad y analizar y evaluar los peligros que plantean los aerostatos. La revisión servirá, según ha contado el titular de Defensa al citado diario, para decidir si es necesario o no introducir cambios en la vigilancia del espacio aéreo británico.

"Reino Unido y sus aliados revisarán lo que estas intrusiones en el espacio aéreo significan para nuestra seguridad. Este acontecimiento es otra señal de cómo el panorama de la amenaza global está cambiando a peor", ha aseverado Wallace. Anteriormente, los diputados del Parlamento británico advirtieron de que los globos podrían haber sobrevolado ya sobre el territorio de Reino Unido, una posibilidad que el Ministerio de Defensa se ha negado a descartar.