El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, puso en duda este viernes en una entrevista a TV Bandeirantes la cifra de muertes por coronavirus en Italia, el país del mundo con mayor número de fallecidos por la pandemia, y en Sao Paulo, y pidió a los brasileños que vuelvan a trabajar.
"La mayoría de las muertes no tiene nada que ver con el coronavirus, nada que ver. Son personas que estaban en una región fría y todos con una media de edad de 80", dijo el mandatario, sin dar más detalles, al referirse al número de fallecidos en Italia, que supera los 9.000.
El líder ultraderechista también cuestionó los números del estado de Sao Paulo, la región más golpeada de Brasil con 68 de los 92 óbitos en el país por COVID-19 y 1.223 de los casi 3.500 positivos registrados en apenas un mes, según datos del propio Ministerio de Salud.
Sobre las cifras de Sao Paulo: "No me estoy creyendo ese número"
Esa cifra "es muy grande para Sao Paulo. Hay que ver lo que está pasando ahí. No puede ser un juego de número para favorecer el interés político", indicó Bolsonaro. "No me estoy creyendo ese número", agregó al ser repreguntado sobre el asunto.
El jefe de Estado mantiene en los últimos días intensos cruces de declaraciones con el gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, quien ha decretado la cuarentena en todo el estado paulista, el más rico y populoso de Brasil, con unos 46 millones de habitantes.
Bolsonaro se ha mostrado contrario a este tipo de medidas restrictivas, adoptadas con mayor o menor alcance por los gobernadores de los 27 estados brasileños y que el propio presidente ha calificado de "crimen".
"¿Algunos van a morir? Van a morir"
"Brasil tiene que volver a la normalidad inmediatamente", aseveró. "¿Algunos van a morir? Van a morir. Lo Lamento, lo lamento, esa es la vida, es la realidad", expresó en otro momento de la entrevista.
También dijo que "algunos" le acusan de estar preocupado "con la economía y no con la vida", una idea que rechazó, aunque resaltó que "con la economía quebrada habrá una pérdida de vidas gigantesca".
"Quien tenga un empleo, que vaya a trabajar", alentó. Asimismo, volvió a minusvalorar la gravedad de la pandemia al afirmar que el coronavirus, "para el 90 % de la población, es una gripecita o nada" y recordó que el año pasado "murieron 700 personas por H1N1".
"Brasil no puede parar y solo pensar en el coronavirus. Hay gente con cáncer, cálculo renal, mujeres que van a dar luz", enumeró. "Hay que acabar con esa crisis de histeria. Brasil no va a parar", insistió.
Bolsonaro generó esta semana una enorme polémica después de un pronunciamiento en red nacional en el que criticó el confinamiento en masa de la población decretado por algunos gobernadores regionales, defendió la reapertura de los colegios, y aconsejó poner en cuarentena solo a ancianos y personas con enfermedades previas.