La Policía alemana prosiguió con el interrogatorio de una de las dos personas detenidas en relación a los "indicios" de que se iba a atentar contra un centro comercial en Essen y dejó en libertad al otro arrestado.

Las fuerzas de seguridad mantienen un pequeño dispositivo en el complejo comercial objeto de la presunta amenaza, siguen interrogando al primero de los dos detenidos y están analizando los objetos de que se incautaron en los dos registros practicados.

El segundo de los detenidos, arrestado en un cibercafé, fue interrogado y abandonó dependencias policiales por la noche.

La Policía considera que gracias a información de los servicios secretos desbarató una trama de "trasfondo islamista" que trataba de perpetrar un atentado en uno de los mayores centros comerciales de Alemania.

El complejo de Limbecker Platz en Essen atrae a unas 60.000 personas al día gracias a más de 200 tiendas, de supermercados y droguerías a tiendas de moda y tecnología, en unos 70.000 metros cuadrados, según datos de su página web.

Además, la Policía elevó su presencia en otro centro comercial llamado Centro, en la vecina localidad de Oberhausen, por motivos de seguridad pese no contar con indicios concretos de que este complejo estuviese amenazado.