El Gobierno prepara una ley para liberalizar los servicios profesionales, y es muy posible que se apruebe en breve porque es una de las recomendaciones de esta semana de la Troika.

Esa ley anula la exclusividad de actividad de algunos sectores, como arquitectos frente a ingenieros, o la liberalización total del negocio de las farmacias. La postura del Gobierno es que así aumenta la competitvidad.

La futura ley tiene a varios sectores enfrentados. Uno de los peor parados podría ser el de los farmaéuticos. De aprobarse el borrador de la ley, cualquier particular, sin ser farmacéutico, podría ser propietario y titular de una farmacia. Esto permitiría la llegada de grandes cadenas de venta. Además, los nuevos propietarios estarían obligados a tener solo a un farmacéutico contratado.

Este borrador de ley afecta a distintas disciplinas, haciendo especial daño a arquitectos y arquitectos técnicos, alterando sus antiguas competencias profesionales. Así queda reflejado en el borrador: "Se suprime la reserva exclusiva de actividad. Podrán proyectar y dirigir obras de edificios residenciales, culturales, docentes o religiosos, arquitectos e ingenieros con competencias en edificación. […] No es proporcionado reservar la actividad de edificación según los usos. Si un profesional es competente para realizar una edificación, se entiende que también será capaz de realizar otras, con independencia de su uso."

Por su parte, los ingenieros industriales ven en esta ley una oportunidad. Si tienen competencias podrían diseñar y firmar edificios residenciales, docentes, culturales y religiosos, que hasta la fecha eran responsabildad de los arquitectos. También los aparejadores podrían acceder a proyectar más edificios de los que hacían.

Otras de las previsiones de esta nueva ley son permitir que los abogados puedan trabajar también como procuradores sin tener que colegiarse o que la ITV pueda pasarse en establecimientos como talleres y concesionarios.

El pasado viernes, el Consejo de Ministros anunciaba que el Anteproyecto de Ley de Colegios y Servicios Profesionales estará listo antes del verano y eliminará los "obstáculos al acceso y ejercicio de la actividad en un número elevado de actividades profesionales", entre las que figuran los arquitectos.