La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha pedido que este tribunal investigue las querellas de Manos Limpias y una asociación de afectados por el falseamiento de los datos de emisiones de Volkswagen al apreciar delitos de estafa, publicidad engañosa, fraude de subvenciones y contra el medio ambiente.

En un escrito dirigido al juez Ismael Moreno, el fiscal explica que el trucaje de los motores diésel pudo afectar al territorio de más de una audiencia, lo que justifica la competencia de la Audiencia Nacional, y que las emisiones lanzadas pueden "haber causado daños sustanciales a la calidad del aire".

El fiscal pide que el magistrado requiera al Grupo Volkswagen la relación de todos los vehículos afectados en España, que la compañía ya cifró 683.626, de los cuales 221.783 corresponden a Seat, así como los comunicados que ha enviado al respecto y el organigrama en España especificando el personal y las funciones de cada uno.

Además, quiere que el grupo, que deberá nombrar abogado y procurador y designar a un representante para que comparezca en su nombre, identifique a la empresa a la que se encargó el software manipulado.

También solicita que el Ministerio de Industria aporte toda la información que haya reunido sobre el asunto, incluyendo el dictamen de la Agencia Medioambiental Estadounidense (EPA) y otras periciales, los informes que le haya aportado la compañía y el montante de las ayudas públicas que se hayan podido otorgar para la adquisición de los coches trucados.