No es un encierro aislado. Se ha repetido en 13 sucursales de Cataluña. Okupaciones sincronizadas para exigir que, de una vez, les escuchen. Una solución a los 115 desahucios que hay al día en nuestro país, uno cada 15 minutos. Y, especialmente, a los de Bankia.

Ada Colau, explica sque "siendo la entidad que más dinero público ha recibido, decenas de miles de millones de nuestro dinero y que ahora mismo está nacionalizada, esta entidad es de las que más está ejecutando y más está desahuciando, además con casos gravísimos de personas mayores de más de 90 años, familias con niños pequeños, con personas con invalidez". Como esta pareja de ancianos. Tienen 90 años y podrían quedarse en la calle.

Todos ellos tienen una historia detrás y poco que perder. Y, por eso, siguen luchando. Han paseado sus reivindicaciones por Barcelona y por otras nueve localidades catalanas. Pitadas fuera y dentro de la sucursal, que sus directivos han tenido que soportar durante horas. Suelos forrados de reivindicaciones, tambores, bocinas, y apoyo logístico para resistir una okupación indefinida.

La okupación, en principio, ha tenido éxito.  Ada Colau explica que "se comprometen por escrito a la reunión con el directivo de Madrid que vendrá expresamente para esto". Se sentará con ellos la semana que viene.  Entonces, añade Colau que "lo damos por bueno, es un paso adelante, esto no lo habíamos conseguido hasta ahora". Bankia cede a la presión, con tal de no ver más carteles en sus puertas. Veremos si sigue cediendo el próximo jueves.