La temporada 2024 de MotoGP no ha hecho nada más que empezar. Con un Gran Premio de Qatar que ya es historia, Marc Márquez se ha mostrado bastante satisfecho con el desenlace del primer fin de semana de carreras. Y es que el de Cervera consiguió una meritoria cuarta posición en su debut con Gresini.

El propio Marc ya señaló que Qatar no era el mejor circuito para lucirse. De hecho, solo ha conseguido una victoria en este trazado, en 2014. Sin embargo, en las ocho últimas visitas en las que terminó en el top-4, el expiloto de Honda acabó siendo campeón, por lo que se puede tomar como bueno este último resultado en Qatar: "En las últimas vueltas decidí lanzar el ataque, pero cuando llegué a Martín no tenía más. Ahí he empezado a contar y era mucho riesgo para tres puntos más".

El ocho veces campeón del mundo no ha querido descartar la posibilidad de batallar por este campeonato, aunque es consciente de la dificultad: "Siempre he dicho que intentaré estar entre los cinco primeros regularmente. Si quieres luchar por algo más tienes que ganar carreras y estar en el podio, pero nunca se sabe".

Por otro lado, la Ducati de Márquez es bastante más previsible a la Honda, algo que le permite afrontar los Grandes Premios con una mentalidad completamente diferente. El piloto "no tenía un fin de semana sin caídas, estable y constante" desde hacía mucho tiempo. El único contratiempo que sufrió fue durante la carrera, cuando se le abrió el mono, aunque la cremallera no bajó del pecho.

De cara a los próximos fin de semanas, Márquez tiene en el punto de mira los objetivos claros a los que ceñirse: "Falta gestionar mejor las curvas rápidas y gestionar mejor el neumático delantero. Hicimos un pequeño cambio en la moto pensando que iba a ayudar, pero no acababa de ir cómodo. Pero a ver si podemos tomar nota de todo ello y aprender".