Jorge Lorenzo puso punto y final a su carrera tras una temporada desastrosa en Repsol Honda. Sin embargo, su incorporación al equipo Yamaha avivó los rumores de su regreso. Él mismo lo ha reconocido, pero con una condición: "ganar el mundial".
"Es cierto que nadie ha cogido el teléfono y me ha llamado para hacer esto. No sé qué podría pasar si ocurriera algo así. Si esto no ocurriera yo estaría feliz igualmente, pero si ocurre por supuesto que les escucharé. Si esta posibilidad pasa por mi mente, por supuesto que la cogería para intentar ganar. Eso si veo esta posibilidad muy clara de que puedo ganar el campeonato", ha asegurado en una entrevista a la web oficial de MotoGP.
Eso sí, el cinco veces campeón del mundo asegura que está "disfrutando mucho de la vida" en estos momentos. "Mentalmente no parece que necesite regresar", explica el piloto español.
"Aunque también los buenos momentos, cuando ganas una carrera o un campeonato son algo increíble, proporcionan una felicidad muy difícil de encontrar en otro sitio", indica el que fuera compañero de Marc Márquez el curso pasado.
"Mi prioridad siempre ha sido ganar el Mundial. Ahora tengo un rol totalmente distinto, y mi objetivo es que algún piloto de Yamaha gane el título", relata sobre su novedoso papel en la marca que le aupó como uno de los mejores del motociclismo.
"El hecho de que la Yamaha no haya cambiado mucho en estos cuatro años es positivo en un sentido y negativo en otro. Positivo porque era una gran moto cuando estaba luchando por el título y me fui, pero por el otro es malo porque en cuatro años no ha cambiado mucho. Ha cambiado en algunas cosas, por ejemplo frenando la moto es un poco más juguetona, puedes jugar más con ella y es menos rígida, creo que esto es algo bueno", sentencia.