Después del Gran Premio de Brasil y de Las Vegas, la carrera de Abu Dhabi ha dejado un sabor un tanto agridulce en los aficionados. Y es que, a diferencia de las anteriores, lo sucedido en Yas Marina no ha sido excesivamente entretenido ni competido.

Sin embargo, pese a ello, el GP de Abu Dhabi siempre es especial para todos los pilotos puesto que significa el broche final a la temporada. Una temporada que, si bien es cierto que ha dominado Max Verstappen de principio a fin, ha tenido momentos muy especiales, como los podios de Aston Martin o la vuelta de McLaren.

Por ello, tras cruzar la bandera a cuadros, los pilotos preguntaron por radio a sus ingenieros si les dejaban hacer donuts o trompos en la pista para celebrar el fin de fiesta. Algo a lo que la respuesta fue prácticamente unánime: "No".

A George Russell, sabiendo que lo iba a intentar, se lo dijeron directamente: "No hagas donuts". "Pero tengo hambre, tío. Vale, entendido, no hay donuts", respondió el británico de manera irónica.

Leclerc también lo intentó con Ferrari: "Voy a hacer unos trompos, ¿vale?". Sin embargo, la jugada no le salió bien al monegasco: "Trompos no, por favor. Y ve más lento, nada de trompos", le contestaron desde el muro.

En Williams, en medio de la efervescencia generada por la séptima posición conseguida en el Mundial de Constructores, Albon aprovechó el momento para tratar de convencer a su ingeniero de que le deje divertirse. No obstante, la jugada no le salió del todo bien y se llevó un rotundo "ni de broma".

 Fernando Alonso, que tiene más experiencia que nadie en la Fórmula 1, era consciente de que no le iban a dejar. "Imagino que no me dejáis hacer trompos", comentó el asturiano por radio. Y, tras la negativa de Aston Martin, Alonso se lo tomó con humor: "En verdad, hice uno en la curva 1 de Las Vegas. Con uno es suficiente".

Por todo ello, el único piloto que hizo donuts y que regaló ese pequeño espectáculo a los aficionados fue Max Verstappen. Y es que el neerlandés, a diferencia de los demás, sí que tenía motivos más que suficientes para hacerlos.