Fernando Alonso no tuvo la clasificación ideal en Austria. El asturiano, uno de los grandes favoritos a todo en la pista de Red Bull, tan 'solo' pudo ser séptimo y quedó incluso tras Lance Stroll, su compañero de equipo en Aston Martin.

Sí, sin duda situación atípica la de Fernando. Primero por salir desde 'tan atrás', entre comillas viendo dónde ha hecho acto de presencia en el resto de carreras al iniciarse la prueba, y segundo porque su superioridad con respecto al canadiense es total tanto en tanda larga como en ritmo de clasificación.

Pero no tuvo su día en Austria. No tuvo su día al igual que tantos otros como por ejemplo Sergio Pérez y George Russell. Y al bajarse del AMR23 explicó el motivo por el cual no tuvo una "situación ideal", en la 'qualy'.

Y fue lo mismo que les pasó a todos los demás. La FIA se divirtió y no precisamente poco con los límites de pista y anuló, ojo, más de 40 vueltas por sobrepasar la línea blanca.

Entre ellas, una de Alonso en Q2 que estuvo a punto de dejarle fuera. Para que no sucediese, Aston Martin actuó haciendo algo que no estaba ni entraba en los planes tanto de Fernando como de la marca inglesa.

"Se nos borró el tiempo de Q2 y nos ha obligado a poner un juego extra de neumáticos para progresar", cuenta Alonso.

Y explica: "Eso nos dejaba tan solo con una oportunidad con gomas nuevas en Q3. No es lo ideal".

Alonso, eso sí, es optimista de cara a la 'qualy' para el sprint y para el propio sprint de este sábado, donde se repartirán los primeros puntos del fin de semana.