Fernando Alonso Michael Schumacher, Lewis Hamilton y Sebastian Vettel son, sin duda, los mejores pilotos de la época moderna en Fórmula 1. El alemán se coronó heptacampeón del mundo dominando con puño de hierro con su Ferrari hasta que un jovencísimo 'Nano' le derrocase con su Renault. A partir de 2010 llegó la hegemonía de Red Bull y Vettel, dando paso posteriormente a la de Hamilton en la 'era híbrida' con Mercedes.

En su intervención en el podcast oficial de Fórmula 1, 'Beyond the grid', Alonso ha hablado de los tres, destacando la rivalidad que mantuvo con todos y apuntado cuál ha sido su mayor rival.

Para el asturiano, Schumacher siempre será Schumacher: "Luchábamos contra la leyenda, contra Michael, contra Ferrari. Fue un momento especial. Michael fue el mayor rival que he tenido en mi carrera. Fue un profesor para mí en muchas cosas"

"Yo era joven, llegaba a la Fórmula 1 y estaba luchando por un campeonato, quizá no estaba listo para semejante reto. Y al lado tenía a Michael, con todo su conocimiento y su mentalidad de no rendirse nunca, de intentar cosas especiales en cada carrera", explica.

"Recuerdo que Renault llevaba un mejor coche, o que pensábamos que llevábamos cosas mejores, y de repente llegaba el fin de semana, hacías la pole que más o menos te esperabas... Y cuando mirabas la tabla de tiempos, veías a Michael segundo y te preguntabas cómo era posible. Pensabas que iba a ser un fin de semana para tomar buena ventaja en el campeonato pero en un mal fin de semana para él, era segundo. Era increíble el rendimiento que podía sacar en un fin de semana que no era competitivo. A veces hacía magia", añade.

Paralelamente, refiriéndose a su etapa en McLaren en 2007 con Hamilton, Fernando cree que, de haber estado ambos mejor preparados, el resultado habría sido mejor: "Con Lewis no tuvimos la competición que yo deseaba, digamos. Sí, en 2007 compartimos equipo y para la gente puede parecer que es la mayor pelea que puedes tener, pero ese año ninguno de los dos estábamos listos. Es entendible que él no lo estuviera, porque era novato y acababa de llegar a la F1, pero yo no rendí al máximo tampoco. No llegué a integrarme en el equipo".

"Ambos luchamos por el título y por victorias, pero no estuvimos bien gestionados en ese momento. Todo el 2007 pensamos: 'Vale, acabamos con los mismos puntos en el campeonato, que se puede ver como una buena pelea, pero ambos podríamos haberlo hecho mejor'. Incluso en los años siguientes yo tuve mejor coche que él, cuando yo estaba en Ferrari y él en McLaren aún, y no pudimos luchar directamente", ha añadido.

Una vez ya en Mercedes, con una 'flecha de plata' mucho más potente, la competición se desvirtuó: "Cuando él cambió a Mercedes tuvo un mejor coche, pero nosotros no tuvimos la oportunidad de luchar. Es un punto perdido en mi carrera, pero es una leyenda en el deporte. Y él, como Michael, te lleva al límite. Si quieres ganar a Lewis, tienes que rendir al máximo".

Ya sobre Vettel, tetracampeón entre 2010 y 2013 con Alonso siempre en el retrovisor, el ovetense incide en que en ningún momento hubo igualdad de fuerzas: "No tuvimos nunca el mismo paquete para competir rueda a rueda, y aún así pudimos pelear por el campeonato un par de veces hasta la última carrera".

"En 2010 y 2012, había que rendir al máximo para batir a un Red Bull ligeramente superior. Tuvieron algunos problemas de fiabilidad y nosotros pudimos mantener la lucha aunque teníamos que bordarlo cada fin de semana", zanja.