Fernando Alonso ya está en Indianápolis. El asturiano, que correrá en un Arrow McLaren SP motorizado por Chevrolet, tiene el óvalo entre ceja y ceja para, por fin, ser campeón de las 500 Millas y tener en sus vitrinas la ansiada Triple Corona del automovilismo.

Será este su tercer intento para obtenerla. Uno que podría ser definitivo. Porque, en esta ocasión, Fernando ya no es un 'rookie'. Porque, además, este McLaren no es ni de lejos el desastre de 2019. Y porque, cómo no, la mayor experiencia de Alonso tanto aquí como en otras competiciones siempre es un valor añadido.

Uno muy, muy importante. Tras completar un gran Dakar, y después de competir ante un muro imposible de subir en Indianápolis el pasado año, Alonso llega más que preparado. Llega, además, sabiendo que su futuro en 2021 está ya más que claro tras haber firmado con Renault para correr, de nuevo, en la F1.

El motor Honda le falló en 2017

Pero lo que toca, de momento, es Indianápolis. Tras lucir su nuevo mono, un elegante mono negro, y compartirlo en redes sociales, el fuego real en el óvalo empezará pronto. Tras ser un novato en 2017, ya eso queda atrás y Alonso es, claramente, uno de los grandes candidatos a victoria.

Ya en su debut estuvo cerca, pero el motor Honda falló cuando apenas quedaban unas vueltas con él en la pelea por un triunfo que, finalmente, fue para Takuma Sato. Con todo, Fernando fue elegido Novato del Año, algo que en este 2020 no sucedería y de poder suceder tampoco sería suficiente.

El 2019 fue un desastre. Fue el único borrón de un año en el que Fernando completó con éxito todas las pruebas que se propuso correr. El McLaren era un desastre. Los británicos no pusieron en liza un coche ni tan siquiera capaz de superar la clasificación y Alonso se quedó sin carrera.

Todo fue un caos, desde el monoplaza hasta ciertas cosas que sucedieron en los boxes. Sin embargo, en esta ocasión van de la mano de Arrow, con un coche que, esta vez sí, puede ganar la prueba.

"Tendrá uno de los mejores coches"

"Fernando Alonso tendrá uno de los mejores coches de la parrilla", dijo Alex Palou, piloto de Indycar, en palabras para 'Marca'.

Y buena razón tienen. El coche es el único que ha estado entre los primeros en todas las carreras, con dos pilotos que, como reconoció Palou, "no son de los más veteranos".

Esa chispa de veteranía es la que puede aportar un Fernando Alonso que tiene como objetivo ser el segundo en lograr la Triple Corona, tras la conseguida por Graham Hill.