El juez ha abierto juicio contra 82 ultras por presuntamente participar en la multitudinaria reyerta en la que falleció el hincha del Deportivo de la Coruña, Francisco Javier Romero, Jimmy, en los alrededores del Vicente Calderón en 2014, para quienes el fiscal pide penas de hasta 2 años y medio de prisión.
En un auto, fechado el 2 de septiembre y al que ha tenido acceso Efe, el titular del Juzgado de Instrucción número 20 de Madrid, Jesús de Jesús Sánchez, acuerda llevar a juicio a los acusados por delitos de riña tumultuaria, tenencia ilícita de armas y atentado en concurso con lesiones.
Se trata de la pieza principal, referente únicamente a la trifulca, y no la investigación de la muerte de Jimmy, que formaba parte de una pieza separada y que se cerró el pasado junio sin culpables, a la espera de que se pronuncie la Audiencia de Madrid.
Todos los acusados se encuentran en libertad provisional a la espera de que los Juzgados de lo Penal de Madrid fijen fecha para la vista oral que, según fuentes consultadas por Efe, podría celebrarse en primavera de 2020.
La Fiscalía les imputa a todos los ultras, pertenecientes al Frente Atlético y a los Riazor Blues, un delito de riña tumultuaria con la agravante de discriminación ideológica, por el que pide entre un año y nueve meses de prisión, además de la prohibición de acceder a recintos deportivos durante la condena.
A cuatro de ellos les añade año y medio por tenencia ilícita de armas, mientras que a dos más les reclama año y diez meses de cárcel por lesiones y atentado. En global, las penas de la Fiscalía oscilan entre los 9 meses de prisión a los dos años y medio de cárcel.
Por su parte, la Liga de Fútbol Profesional (LFP) que ejerce la acusación popular, pide entre uno a tres años y medio de cárcel, si bien precisa que las penas por algunos delitos podrían ser sustituidas por multas que oscilan entre los 72.000 y 117.000 euros.
El escrito de la fiscal, al que ha tenido acceso Efe, señala que el 30 de noviembre de 2014 hinchas del Frente Atlético y Riazor Blues, con ideologías políticas contrarias - de extrema derecha los primeros y de extrema izquierda los segundos-, "se convocaron en las redes sociales" para acudir a las 09.00 horas a las inmediaciones del estadio con la "única motivación de demostrar al otro grupo la primacía de su equipo y de la ideología con la que se identifica".
Allí, los acusados "se acometieron recíprocamente" de "forma violenta, confusa, aleatoria y tumultuariamente" actuando "en todo momento en grupo" y "portando algunos de ellos armas prohibidas e instrumentos peligrosos como palos de madera, de aluminio, porras, bates de béisbol, navajas, mosquetones, defensas extensibles", un "extremo conocido y aceptado por todos los participantes".
Muchos de los acusados resultaron heridos así como varios policías en aquella pelea en la que falleció Jimmy, sin que hasta la fecha se hayan encontrado a los autos materiales de su muerte.