El Manchester City es supercampeón de Europa por primera vez en su historia tras vencer en penaltis al Sevilla gracias al fallo de Gudelj.

El partido, pese a que intuía ser un dominio de la posesión del Manchester City, comenzó de una manera muy igualada. Las ocasiones se repartían por igual, pero el primer susto lo metieron los ingleses. Bono, en la que podría ser su última aparición con el Sevilla, salvó un cabezazo a bocajarro de Aké.

Esa ocasión empezó a encajonar al cuadro hispalense, que no perdía la cara al partido contras mediante y allí encontró su premio. Acuña, en una jugada de cuatro toques, puso un centro dentro del área que En-Nesyri fue capaz de rematar a gol pese a la oposición de dos defensores 'citizens'.

El tanto despertó a los sevillistas, que comenzaron a dominar la posesión de balón y dejaron de sufrir los ataques ingleses hasta el borde del descanso, cuando volvieron a amenazar con el empate.

El comienzo de la segunda parte sorprendió a los de Pep Guardiola ya que se convirtió en un asedio del Sevilla. Primero pidieron penalti por mano que no señaló el colegiado y luego En-Nesyri tuvo el 2-0 con una gran contra dirigida por Ocampos en la que el marroquí erró el uno contra uno ante Ederson.

Los minutos se iban añadiendo al marcador y la tónica del encuentro era la misma: posesión del Manchester City que acababa en pérdida y ocasión del Sevilla en una contra dirigida por Lucas Ocampos y Youssef En-Nesyri, que tuvieron en repetidas ocasiones la oportunidad de dar el gol de la tranquilidad.

Y cuando mejor estaba el Sevilla, llegó el gol inglés. Rodri puso un centro lateral perfecto que Cole Palmer remató a placer en el área pequeña para empatar el encuentro. Acto seguido, el delantero marroquí volvió a tener otro mano a mano en el que Ederson volvió a imponerse y la frustración empezó a apoderarse de los sevillistas.

El Manchester City acabó de imponerse en el partido y el Sevilla empezó a achicar agua. Sin ninguna ocasión clara, pero los 'citizens' merodeaban la portería de Bono continuamente. Y el partido acabó con empate y, al no haber prórroga, el supercampeón de Europa se decidió en la pena máxima.

Y en la tanda de penaltis, el destino fue cruel con el Sevilla. Anotaron los nueve primeros lanzadores y le tocó el turno a Nemanja Gudelj, que envió su disparo al larguero y proclamó supercampeón de Europa al Manchester City.