Luis Rubiales, expresidente de la RFEF, ha escrito un comunicado tras conocer la inhabilitación de tres años de la FIFA. El de Motril ha confirmado que va a apelar la sentencia, aparte de explicar cómo ha sido y ha vivido todo el proceso.

Así lo cuenta Rubiales, quien desde un comienzo deja claro que va a "apelar".

"Tras serme notificada el 24 de agosto la apertura del expediente de la FIFA, se me dio un plazo de diez días para exponer mi posición sobre los hechos descritos en los documentos de dicho expediente. El 26 de agosto, FIFA se puso en contacto con la señora Jenni Hermoso solicitando confirmación de que la declaración de FUTPRO tenía que ser considerada como 'sus palabras", cuenta.

Y sigue: "Respondió diciendo 'muchas gracias por este email. Confirmo que la publicación es mía'. A las 6:59 de Colombia se me notifica la imposición de suspenderme cautelarmente durante 90 días junto a una prohibición de contactar, tanto de manera directa como de forma indirecta, con la señora Hermoso o con su entorno".

"Fui suspendido sin poder declarar o aportar pruebas"

"Es decir, a los dos días de darme un plazo de diez se me notifica la suspensión cautelar de mi cargo, sin haberme escuchado. Una hora y 12 minutos después del email de la jugadora, y sin darme la posibilidad de declarar ni de aportar ninguna prueba, fui suspendido de mis cargos por FIFA", dice Rubiales.

El expresidente continúa con su comunicado: "El procedimiento FIFA se ha caracterizado por emitir decisiones sin los fundamentos de las mismas. Me ha impedido presentar apelación de forma inmediata a lo que se traduce que a día de hoy llevo 66 de los 90 días suspendido sin haber tenido una audiencia completa para defender".

A pesar de que presenté mi renuncia..."

"En los fundamentos de la primera decisión que me suspendía cautelarmente durante 90 días y que no fueron emitidos hasta el día 15 de septiembre y notificados el 19, la Comisión Disciplinaria basó la decisión y la urgencia en que "mi presencia como presidente de la RFEF podía impedir la administración de justicia", prosigue.

Rubiales dice lo siguiente: "La decisión del Comité de Apelación rechazó mi apelación el 29 de septiembre, a pesar de que el día 11 presenté mi renuncia al cargo en la RFEF y en UEFA, donde era vicepresidente. Si no tenía cargo alguno en el mundo del fútbol, ¿cómo puedo ser un peligro para el proceso por tener un cargo?"

"Todo fue notificado sin fundamentos. A día 30 de octubre todavía no se me han trasladado, impidiéndome de nuevo apelar la decisión ante el TAS. Todo, solo en lo que respecta a las medidas cautelares impuestas. Se solicitó audiencia, pero se me denegó, sin explicar el motivo", afirma el expresidente de la RFEF.

De nuevo, el "linchamiento político y mediático"

Y relata: "He denunciado ante FIFA y el TAS que la comisión disciplinaria desde un comienzo decidió incluir en el expediente únicamente las declaraciones que, según la prensa, declararon en mi contra ante la Audiencia Nacional, noticias que ahondaban en una idea negativa hacia mí, sin tener en cuenta cualquier noticia o publicación en ningún otro sentido".

"Cualquier ente juzgado, entiendo, debe tener en cuenta todas las pruebas disponibles y no solo las que sustentan la versión de la parte que quiere condenarme. Es más, esas opiniones en alguna que otra ocasión han sido efectuadas por personas que no son parte del procedimiento", dice Rubiales.

De nuevo, Rubiales apunta al "linchamiento político y mediático": "Ha generado una ola en la que determinadas instituciones han querido actuar de cierta forma, más allá de preservar la presunción de inocencia o de dar a todas las partes las mismas oportunidades, para que el proceso fuese justo y proporcional".

"Pese a los esfuerzos de ciertos políticos..."

"También tengo claro que, pese a los esfuerzos de determinados políticos, medios e instituciones, cada vez es más clara la desproporción e injusticia cometida en este asunto. La gente en el día a día también se da cuenta de forma muy mayoritaria", sentencia.