El Leicester enterró su racha triunfal en Goodison Park, donde perdió ante el Everton (4-2), tres días antes de acudir al estadio Vicente Calderón para enfrentarse al Atlético Madrid en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones.
Los 'Toffees', que llevaban dos encuentros sin ganar -derrota ante el Liverpool y empate frente el Manchester United- aprovechó las rotaciones de Craig Shakespeare, que encajó su primera derrota como máximo responsable de los 'foxes'. El preparador del Leicester, con la mente puesta en la competición continental, dejó de lado la buena línea en la Premier, una vez olvidados los agobios por la permanencia y cambió la mitad del equipo habitual.
De entrada, dejó en el banquillo a hombres aparentemente titulares como el argelino Ryad Mahrez, el nigeriano Wilfred Ndidi, el japonés Shimji Okazaki, el austríaco Christian Fuchs o el capitán Danny Simpson. La zaga al completo quedó al margen del choque ante el Everton. El Leicester, que acumulaba cinco victorias consecutivas, se sobrepuso en un arranque diabólico.
Se topó, de entrada con el tanto de Tom Davies al minuto de juego, que recibió un pase de Kevin Mirallas para batir a Kasper Schmeichel. Tres después empató el Leicester. El argelino Islam Slimani aprovechó un buen pase de Damaral Gray dentro del área y anotó el empate.
Frenético partido en Liverpool
En medio de un frenético ritmo de juego y un vaivén de asaltos a cada área el cuadro visitante salió beneficiado. En el minuto 10, Marc Albrighton lanzó una falta lateral que no adivinó el meta español Joel Robles, que midió mal y vio entrar el balón a su portería.
El Leicester se puso por delante. Pero el Everton dejó en evidencia la fragilidad de una zaga poco habitual. Así, en el 23, un pase de Ross Barkley fue culminado por el belga Romelu Lukaku, que llevó a maltraer al conjunto de Shakespeare. Sin tiempo para la relajación el Everton tomó la iniciativa en el marcador poco antes del intermedio. Con un córner botado por Kevin Mirallas que fue rematado por Phil Jagielka de cabeza. Intentó reaccionar tras el descanso el Leicester, que se topó pronto con otro contratiempo.
Fue en una nueva aparición de Lukaku, que se hizo un hueco dentro del área y disparó raso por el centro lejos del alcance de Schmaichel. Fue a la hora de juego. Inmediatamente reaccionó Shakespeare, que a continuación hizo un doble cambio. Dio entrada a Riyad Mahrez y a Ahmed Musa en el puesto de Demarai Gray y de un desafortunado Jamie Vardy, al que también quiso dar descanso. No le salió bien.
El Leicester acentuó su ataque sobre la meta de Joel pero careció de acierto. La entrada del argentino Leonardo Ulloa a diez del final fue su última bala. Cercó la meta local. Pero sin fortuna. Abandonó el rival del Atlético Madrid Goodison Park sin puntos. Instalado en el ecuador de la clasificación y a la espera de su gran cita del miércoles.
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