Jon Rahm fue el encargado de realizar el saque de honor del partido entre el Athletic y el Atlético en San Mamés. El saque de honor de un partido que acabó con victoria de los vascos, y con un equipo, el de Simeone, exhibiendo una más que pobre imagen que pareció no preocupar al entrenador argentino. 

El de Barrika saltó al verde con la clásica camiseta negra que lucía Iribar. Con ella posó, con ella golpeó a la bola. Y con ella se fue a su localidad de socio.

Eso sí, la intención que tenía era otra. Y así se anunció, porque la idea era que Rahm saliera al campo con la chaqueta verde de campeón del último Masters de Augusta. Sin embargo, no fue posible.

Según apunta la web 'ten-golf.com', Augusta vetó el que Rahm portase dicho elemento en su vestuario tras su fichaje por el circuito saudí LIV Golf. 

El de Barrika sí pudo lucir la chaqueta verde en, por ejemplo, el saque de honor que hizo en junio en un partido de la MLB.

Sin embargo, en esta ocasión no ha recibido el permiso para poder lucir dicha prenda en San Mamés.