El rapero estadounidense Rakim Allen, conocido por el nombre PnB Rock, fue asesinado a tiros este lunes 12 de septiembre mientras cenaba con su novia en un restaurante al sur de Los Ángeles, según ha informado 'The New York Times'. El presunto autor del crimen acudió al lugar para robar al rapero y le disparó casi de inmediato. El Departamento de Policía de Los Ángeles ha informado de que consideran que la causa puede ser una publicación de Instagram que delataba su ubicación.

Dicha publicación a Instagram la hizo su novia, la foto —ya eliminada— etiquetaba la localización del restaurante Roscoe’s House of Chicken and Waffles y además mostraba las copiosas cantidades de joyería que llevaba el rapero, así como otros objetos de valor.

"Estaba con su familia —su novia o amiga suya— disfrutando una cena sencilla" declaró el jefe de la Policía, Michel Moore, antes de proceder a explicar que "un hombre, negro, creemos que llegó en coche al lugar y atacó directamente al señor PnB Rock demandando sus pertenencias" y que "perdió su vida allí simplemente por sus joyas y objetos valiosos".

El rapero de 30 años es conocido por sus temas como 'Selfish', 'Middle Child' o su colaboración con Ed Sheeran y Chance the Rapper 'Cross Me'. Su disquera, Atlantic Records dijo en una publicación de Instagram en su honor que “PnB Rock era más que un artista” sino que además era un amigo y padre. Y más que eso condenaron esta muerte como “una pérdida sin sentido”.

PnB Rock formaba parte de una ola de raperos que cantan y rapean, como Drake —quien le inspiró a hacer música a los 19 años— o Doja Cat. En una entrevista a ‘People’ en 2017 dijo: “La gente no puede decir que soy un rapero, pero tampoco siento que sea un cantante. No estoy llegando a notas altísimas y volviéndome loco. No puedo darte el canto de Chris Brown, solo tengo buenas melodías”.

Irónicamente, una semana antes de su muerte, durante una entrevista para el podcast de DJ Akademiks, compartió las diferencias entre el crimen de Los Ángeles y el de Filadelfia, de donde es originalmente. “Nunca me han robado, nunca en la vida” confesó durante el episodio, pero sí recordó una ocasión en la que fue perseguido en Los Ángeles, un contraste grande con los “criminales sigilosos” de donde proviene; en la ciudad de california son más “osados”.

Estados Unidos ha presenciado varios asesinatos de raperos en los últimos años, Young Dolphe, Pop Smoke, Nipsey Hussle o XXXTentacion por nombrar a algunos. El periódico de la ciudad, ‘Los Ángeles Times’ reportó que “la comisaría comunitaria del sureste de la policía de Los Ángeles, que cubre la zona donde se produjo el tiroteo del lunes, ha registrado 34 homicidios este año hasta el 3 de septiembre, frente a los 35 del mismo periodo del año pasado”. Y no solo eso, sino que “las estadísticas también señalan un aumento del 25,2% en los robos durante ese periodo, de 373 a 467”.

Si lo que propició la muerte de PnB Rock fue esa publicación en Instagram, sería otra ocasión que prueba lo expuestas que están las vidas de los famosos y lo comedidos que deben ser con lo que publican. Pop Smoke también fue asesinado por una invasión de su hogar después de una publicación en Instagram; unas pilas de dinero y etiquetas de bolsas de regalo aparecían con la ubicación de su casa. También está el famoso robo en París a Kim Kardashian tras publicar una fatídica foto en Instagram con un anillo de cuatro millones de euros y publicaciones constantes de su ubicación en tiempo real durante la Semana de la Moda parisina.