La misión se envió al
espacio el 16 de julio, llegó a la superficie de la Luna el 20 de julio y al
día siguiente logró que Armstrong y Aldrin caminaran sobre la superficie lunar.
El Apolo 11 fue
impulsado por un cohete Saturno V desde el complejo de Cabo Kennedy, en
Florida. La misión está considerada como uno de los momentos más significativos
de la historia de la Humanidad y la Tecnología, según la NASA.
La tripulación del Apolo
11 se completaba con Michael Collins, que quedó orbitando la Luna a bordo del
módulo de mando Columbia, al que el módulo de aterrizaje se reacopló tras
abandonar la superficie lunar con numerosas muestras y volver a la Tierra.
Armstrong fue el primer
ser humano que pisó la superficie de nuestro satélite, el 21 de julio de 1969 al
sur del Mar de la Tranquilidad (Mare Tranquillitatis). Al tocar la superficie
Armstrong pronunció una de las frases más conocidas de nuestro tiempo: "Un
pequeño paso para un hombre, un gran salto para la Humanidad".
Además de astronauta,
Neil Armstrong era también era ingeniero aeroespacial, piloto militar, piloto
de pruebas y profesor universitario. Realizó su primer vuelo espacial en 1966
como piloto al mando de Gemini 8.
En diciembre de 1968 se
le ofreció comandar la misión Apolo XI. Meses antes de la misión, se decidió
que Armstrong sería el primero en descender por el diseño del módulo lunar: la
escotilla se abría hacia dentro en el lado derecho y ello dificultaba que el
piloto del módulo, Aldrin, saliera primero.
El 24 de julio, los tres
astronautas lograron un perfecto amerizaje en aguas del Océano Pacífico,
poniendo fin a la misión espacial más trascendental hasta hoy en día.