"Nuevos resultados de nuestro equipo del Consejo contra el Cáncer NSW pronostican que el cáncer puede potencialmente eliminarse en 2035 y Australia sería el primer país en hacerlo", dijo la directora de investigación de este organismo, Karen Canfell.

El estudio destaca que Australia se beneficia de haber sido el primer país en introducir la vacunación contra el virus del papiloma humano (VPH) y del programa de exámenes médicos introducido el año pasado.

Según Canfell, la combinación de ambos reducirá la mortalidad por cáncer de cérvix o cuello del útero a menos de 6 por cada 100.000 en 2022, lo que permitirá a Australia clasificar como una forma rara de cáncer esta enfermedad que supone la principal causa de muerte de las mujeres en los países subsaharianos.

El nuevo programa nacional de exámenes prevé que las mujeres hagan su primer chequeo a los 25 años y después cada cinco años si no se detecta riesgo de VPH, cuya infección está asociada con el virus de cáncer de cérvix, cáncer de vagina, vulva, ano, pene y orofaringe.