HASTA 231 CABALLOS AL INSTANTE
Probamos el Cupra Born e-Boost: aún más 'chispa' para el compacto eléctrico
Con el paquete e-Boost, la potencia sube hasta los 231 CV y, con la batería de mayor tamaño, también llega una mejora en velocidad de carga. Ahora el Born, con esta configuración, puede admitir cargas de hasta 170 kW, lo que reduce mucho los tiempos de recarga.
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El Cupra Born e-Boost, ha vuelto a nuestras manos tras haber pasado por ellas en la sección 'Consumo sin humo'. Entonces, en la prueba a 90 km/h la autonomía que nos dio fue de 469 kilómetros reales. Mientras que en autopista, a 120, nos daba la cifra de 391 kilómetros.
Con el paquete e-Boost, la potencia sube hasta los 231 CV y, con la batería de mayor tamaño, también llega una mejora en velocidad de carga. Ahora el Born, con esta configuración, puede admitir cargas de hasta 170 kW, lo que reduce mucho los tiempos de recarga.
Estética deportiva con 4,32 metros de largo. Fuera, destacan los frenos de disco delanteros, más grandes, y las llantas de 19 pulgadas, que envuelven los neumáticos Michelin Sport EV. Ya en el interior, hay que destacar que, con esta batería solo estaba disponible con cuatro plazas, pero, a partir de este año, también está disponible con cinco plazas.
Gracias al botón Boost del volante, tenemos esos 27 CV extras, que son muy útiles para adelantar. Un impulso extra de potencia instantánea que dura unos 30 segundos, y que también se consigue pisando a fondo el acelerador. Hay que reconocer que es un compacto con picante, con un paso de 0 a 100 kilómetros por hora en 7 segundos, y de 0 a 50 en solo 2,8. A esto se une una gran agilidad, que da mucha confianza en cualquier tipo de situaciones.
La potencia llega desde el motor situado en la parte de atrás, y la propulsión trasera hace que tengamos una sensación más deportiva de conducción. La fuerza se transmite a las ruedas mediante una transmisión de una sola velocidad y de forma bastante suave. Una suavidad que se extiende a la conducción o a la forma en que recupera energía con la frenada regenerativa. Se activa poniendo el selector en el modo B. Solo hay que levantar el pie del acelerador y el coche hace el resto.
La frenada regenerativa se activa de forma automática si el coche detecta que nos vamos a parar próximamente, tenemos un vehículo delante o circulamos con el control de crucero activado. Gracias a este sistema se reducen las veces que tenemos que pisar el pedal del freno.
Sobre todo, se ahorra desgaste de los frenos en ciudad y se simplifica la forma de conducir. Al levantar el pie del acelerador se alcanzan deceleraciones de hasta 0,3 G, mientras el motor actúa como generador para devolver energía a la batería. Estas cosas ya las habíamos probado, pero este nuevo Cupra Born tiene otras nuevas…
Nuevos elementos de equipamiento opcionales como el sistema Travel Assist con control velocidad y mantenimiento en el carril, capaz de hacer adelantamientos automáticamente. O el Asistente de Parking inteligente, que puede memorizar cinco maniobras de aparcamiento, para repetirlas autónomamente, con el conductor dentro del coche y en recorridos inferiores a 50 metros a una velocidad de 40 km/h.
Desde mi punto de vista lo tiene todo, un diseño atractivo, un interior intuitivo y con potencia de sobra. Lo que más me sorprende del Cupra Born es lo ágil que es en curva. La dirección va muy bien, es directa, y da sensación de aplomo incluso a alta velocidad.
Es un coche muy versátil, puede ser tu mejor aliado en ciudad o un auténtico misil en un tramo de montaña. Sin lugar a dudas, uno de los coches eléctricos más camaleónicos del mercado. Dale al play y lo verás.
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