Todos con casco en ciudad: la nueva norma para ciclistas y patinetes

En la lista de tareas del Ayuntamiento de Madrid figura la nueva Ordenanza de Movilidad Sostenible. Está previsto que reciba luz verde cuando arranque el verano y con ella llegará una normativa que cambiará el escenario urbano para mejor: cuando entre en vigor, todos los usuarios de bicicletas y patinetes tendrán que llevar casco de forma obligatoria.

El impulso definitivo para dar forma a esta medida han sido las preocupantes cifras de siniestralidad registradas en la capital. Son muchos los ciudadanos que eligen la bicicleta como medio de transporte y ese incremento de uso se ha traducido, por desgracia, en un aumento de los accidentes protagonizados por estos vehículos de dos ruedas: se ha pasado de los 340 en 2010 a los 921 en 2020.

El consistorio local ha buscado, por lo tanto, mejorar la seguridad vial para reducir la siniestralidad. Y es que según los datos de un estudio que la Dirección General de Tráfico (DGT) llevó a cabo entre 2006 y 2015, las lesiones cerebrales son las más frecuentes entre los ciclistas fallecidos: se dan en el 31% de los casos.

De 16 a 18 años

Con el foco puesto en los colectivos más vulnerables (peatones y ciclistas), Borja Carabante, delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, ha confirmado la nueva norma que entrará en vigor en la capital dentro de un mes y medio: “En junio aprobaremos el anteproyecto de la Ordenanza de Movilidad Sostenible. Una de las novedades que incluye es el uso obligatorio del casco para para menores de 18 años a bordo de la bicicleta, extensible a todos los ‘riders’ que reparten comida y mercancías”. A estos colectivos hay que sumar todos aquellos usuarios que se muevan en vehículos de movilidad personal (VMP).

Hasta ahora, la norma que imperaba era la de la Dirección General de Tráfico: el uso del casco homologado o certificado sólo era obligatorio cuando se circulaba en vías interurbanas y dentro de la ciudad únicamente era imperativo para los menores de 16 años. Ahora Madrid eleva ese listón hasta los 18 y, además, amplía el espectro para los trabajadores que se mueven en bicicleta o patinete.

Aparcar las bicicletas

Este sistema de protección no será la única novedad de la citada ordenanza. Con ella llegará una nueva obligación para los usuarios de bicicletas y patinetes: tendrán que estacionar, obligatoriamente, en los anclajes específicos que estarán ubicados, en su mayoría, en la calzada. Ahora mismo en Madrid hay 1.250 de estos puntos con cuatro o cinco horquillas para aparcar la bicicleta, pero a finales de julio ese número crecerá: llegarán 306 nuevas instalaciones que darán cabida a 610 vehículos más.