PUEDE SALVARTE DE MÁS DE UN PROBLEMA
El documento que deberías solicitar si vas a comprarte un coche usado
Es posible reducir al máximo los riesgos al adquirir un coche de segunda mano.
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El mercado de coches nuevos vive en los últimos meses una situación atípica: con precios muy inflados debido a una producción que se ha reducido ostensiblemente, son muchos los potenciales compradores que han decidido virar hacia el mercado de segunda mano, donde la oferta es más amplia y, sobre todo, la disponibilidad e inmediatez de los vehículos es mucho mayor.
Sin embargo, es evidente que el adquirir un vehículo usado conlleva una serie de riesgos que no encontramos en los vehículos nuevos. Y es que el historial de un coche de segunda mano puede esconder ciertos secretos que pueden resultar realmente desagradables para el nuevo comprador, de ahí que tomar las máximas precauciones posibles a la hora de adquirir tu 'nuevo-viejo' coche sea siempre una gran decisión.
El documento que deberías solicitar si quieres un coche usado
Comprar un coche de segunda mano con el mayor historial posible en cuanto a revisiones, reparaciones y dueños es una buena decisión: posiblemente tengas que gastar algo más dinero respecto a un vehículo con un historial menos claro, pero la realidad es que, a la larga, ese dinero extra que has gastado es una gran inversión, tanto en términos económicos como en términos de tranquilidad. Además, si pasado el tiempo decides vender el coche, éste conservará mejor su valor si cuenta con un historial claro y demostrable.
Si quieres comprar un coche de segunda mano te recomendamos que acudas a la DGT y te hagas con un informe completo, donde podrás conocer detalles como el historial de inspecciones técnicas o el kilometraje que se ha ido registrando en cada paso por una estación de ITV, pero también te invitamos a que te hagas con un documento que poca gente conoce y que puede resultarte de gran utilidad.
Nos referimos a la nota simple, un documento que puedes solicitar en el registro de Bienes Muebles de manera rápida y barata, ya que su coste apenas asciende a 9 euros. Además de solicitarlo de manera física en cualquier sede del Registro, también puedes hacerlo de manera telemática mediante la página web del Colegio de Registradores. En cualquier caso, sólo necesitas la matrícula o el nº de bastidor del vehículo.
La información que nos facilita esta nota simple es muy amplia, desde el nombre del actual propietario del vehículo hasta el nº de propietarios, los diferentes contratos, los leasing, los renting o, incluso, las diferentes reclamaciones o embargos que haya tenido tanto en el pasado como activos en el momento de la consulta.
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