¿NOS QUEDAMOS SIN DIÉSEL EN EUROPA?
Diésel en Europa: la escasez ya es una realidad
La parece que interminable crisis de la energía comienza a tener consecuencias serias en nuestro mercado.
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La crisis energética que estamos viviendo en casi todo el planeta se está cebando, especialmente, en Europa: los precios de materias primas como el gas natural, el carbón o el petróleo se ha disparado en los últimos meses, lo que ha obligado a Europa a tomar medidas urgentes para reducir el impacto de estas salvajes subidas sobre la economía de los ciudadanos. Así, en nuestro país, contamos con ventajas (temporales) como el tope al precio del gas o el descuento de 20 céntimos/litro en los carburantes.
Estas medidas, sin embargo, pueden no resultar suficientes si el precio de base de la materia prima es demasiado elevado, algo que puede suceder -y está sucediendo- con el precio del gasóleo. Y es que si has pasado por alguna gasolinera en las últimas semanas te habrás dado cuenta de que el precio de la gasolina ha comenzado a ascender de nuevo de manera lenta y sostenida, mientras que el precio del diésel ha vuelto a dispararse de manera más que preocupante.
¿Qué sucede con el diésel para que su precio se haya disparado de nuevo? ¿Estamos empezando a vivir una época de escasez de gasóleo?
¿Escasez de diésel en Europa?
Según ha afirmado el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, la interrupción en el suministro de petróleo desde Rusia y la detención en la producción de carburantes en las refinerías de Francia está comenzando a suponer un problema serio a nivel de suministro, ya que la demanda de diésel no se ha reducido mientras que, por otro lado, la producción de diésel se ha reducido significativamente. Este escenario supone un problema que, en resumen, se traslada al consumidor en forma de importantes incrementos de precio.
No sólo el diésel está afectado: también el combustible para calefacción y el combustible para aviones se están viendo afectados por esta crisis de producción, lo que a la larga también supondrá un problema de precio para el consumidor final. ¿Qué podemos esperar en los próximos meses de cara a repostar nuestros vehículos y encender nuestras calderas? Básicamente, unos precios más altos de lo que nos gustaría, de manera que debemos pensar en un invierno con el diésel de automoción en el entorno de los 2€/litro de manera estable.
Mientras tanto, la gasolina no parece que vaya a sufrir los problemas de suministro que está viviendo el diésel, aunque es cierto que su precio, como ya hemos mencionado, se ha incrementado en los últimos meses tras un final de verano con precios más reducidos de lo que se esperaba.
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