La escarlatina es una enfermedad infecto-contagiosa que fue muy común en el S. XIX y que sobre todo, afectaba a los niños/as. Tiene unos síntomas muy característicos como es por ejemplo, la inflamación y el dolor de garganta (faringoamigdalitis) acompañada de fiebre o erupciones de color rojo.

En la actualidad, esta enfermedad no suele ser grave (como sí lo era entonces) y se trata con antibióticos. El pasado mes de diciembre, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó de un aumento de casos de escarlatinaen Europa.

En España, y según han alertado también algunas comunidades autónomas han avisado de un aumento de casos de la bacteria estreptococo A, la causante de esta enfermedad, pero es importante trasladar que no alerta sanitaria.

No obstante, y como avisaba la Sociedad Española de Infectología Pediátrica de la Asociación Española de Pediatría (SEIP-AEP), a finales del año pasado,se estudian posibles casos de infección en niños y en niñas por la bacteria estreptococo A, que no suele provocar complicaciones, aunque en ocasiones puede derivar en otras enfermedades como es la escarlatina.

Según explica esta sociedad, la bacteria estreptococo A es el causante de la escarlatina que se transite entre los niños/as por vía respiratoria.

Síntomas y tratamiento de la escarlatina

Como explican desde su web oficial la Clínica Universidad de Navarra (CUN), "la escarlatina es una enfermedad infecto-contagiosa aguda que afecta a la infancia" y que se transmite desde la persona enferma a la sana, a través del aire, por las gotitas de saliva o bien a través de través de objetos o alimentos de personas contagiadas, aunque esta vía es mucho menos frecuente.

El pronóstico en la actualidad es bueno con el tratamiento adecuado, tal como apuntan los expertos de este centro. Normalmente, el tratamiento consiste en: beer abundante líquido; reposo; analgésicos y antitérmicos y antibióticos: "la penicilina es el antibiótico de elección en inicio, salvo en personas alérgicas en las que se usará eritromicina", exponen desde la CUN.

Por otro lado lado y tal como informan desde el portal médico Mayo Clinic, esta enfermedad en el pasado era grave en la niñez, pero los tratamiento con antibióticos ha hecho que no sea peligrosa. No obstante, si no se trata "puede provocar afecciones más graves que afectan el corazón, los riñones y otras partes del cuerpo".

Los síntomas de la escarlatina son:

  • Dolor e inflamación de garganta (faringoamigdalitis)
  • Fiebre alta
  • Vómitos y malestar
  • Dolor de cabeza; y dolor en general por todo el cuerpo
  • Erupciones de color rojo en el cuerpo (color rojo escarlata)

Igualmente, y como explicaba a EFEsalud el Dr. José Tomás Ramos, presidente de la ya citada SEIP-AEP, "el primer síntoma es el dolor de garganta es decir, una faringitis estreptocócica" que al cabo de uno o varios días, se suelen producir una serie de lesiones, de erupciones enrojecidas en el cuerpo "que suelen picar un poquito y también afectar a la lengua", tal como añadía el doctor.

Es importante consultar al médico cuando, según informa la Mayo Clinic, su hijo/a tenga dolor de garganta y vaya acompañado de: fiebre alta por encima de los 38; glándulas inflamadas o sensibles al tacto en el cuello y erupción o los sarpullidos característicos que hemos indicado anteriormente.

En cuanto a la prevención, ya que no existe una vacuna contra ella, es importante mantener algunas medidas de higiene ya conocidas por todos, con motivo de la pandemia del COVID-19. Así y tal como aconsejan desde la ya citada Clínica Mayo, las mejores estrategias de prevención son las de cualquier infección respiratoria: lavarse las manos; no compartir alimentos ni utensilios de comida y cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar.