Este domingo, 18 de febrero (18F) Galicia vota. Los gallegos elegirán al que será su presidente/a a la Xunta de Galicia durante los próximos cuatro años y todo parece, de momento, indicar que el PP de Alfonso Rueda, sustituto de Alberto Núñez Feijóo, se llevará el gato al agua en estas elecciones gallegas.

Sin embargo, algunas encuestas, incluida la del CIS, no le dan por segura la mayoría absoluta a los populares. Mientras que el BNG de Ana Pontón va ganando fuerza con los días. Por lo que, de momento, todo sigue abierto y el partido aún no se ha jugado. Como siempre, hasta que las urnas no se llenen y el partido se haya ya jugado, no podremos conocer el verdadero resultado.

De momento, todo son encuestas, pronósticos y demás previsiones. Si no, recordamos lo que pasó en estas últimas elecciones generales del 23-J. Todo parecía indicar que PP y Vox gobernarían pero finalmente, las urnas hablaron y la mayoría parlamentaria se la llevó de nuevo el PSOE.

De momento, en juego están los 75 escaños que componen el parlamento gallego y 38 los escaños que conformarían la mayoría absoluta. De momento y según el último CIS publicado, así quedarían los resultados:

  • PP: 34-38 escaños
  • BNG: 24-31escaños
  • PSOE: 9-14 escaños
  • Sumar: 0-2 escaños
  • Vox: 0-1
  • Democracia Ourensana: 0-1

Y es que a pesar de que "las encuestas reflejan un panorama muy favorable al PP, las encuestas no son pronosticadores de nada", explica a laSexta.com Benlly Hidalgo, profesor, consultor digital y experto en marketing político. Y es por ello, argumenta el experto, "el PP gallego no debería confiarse".

Pues existen tres factores que podrían decantar o no la balanza hacia un lado: la fragmentación del voto, la alta participación y el posible surgimiento de nuevos actores. Todo ello "pueden influir mucho en la situación", asegura Hidalgo.

Por otro lado, "en cuanto al BNG, espera con expectación y tiene la intención de estar presente en una fuerza que podría igualar al PP; sin embargo yo creo que el PSOE, aunque con menor margen, debería dar una gran sorpresa", opina el especialista.

No, las encuestas no son definitivas

"Las encuestas y sondeos son una fuente útil pero no deberían ser el final del proceso de toma de decisiones. La capacidad de ajustar tus tácticas a las de tus rivales, los votantes que han cambiado y escudriñar minuciosamente las encuestas es lo que se necesita para ganar las elecciones", explica Hidalgo.

Por ello, las encuestas pueden compararse con una "veleta" que, aunque útil, "no es una medida o indicador infalible del clima político general. Es esencial que los políticos no dependan completamente de los resultados de las encuestas, sino que los consideren como un método más en su arsenal al planificar sus estrategias".

La ciencia nos dice que "las encuestas son instrumentales pero no definitivas. La forma de llevar a cabo una campaña exitosa es comprender estas cifras en un contexto más amplio y crear planes que aborden genuinamente las preocupaciones del público. Es todo un juego de percepciones que las encuestas nos dan las temperaturas del votante, en un momento determinado, pero de un día para otro, todo puede cambiar", sostiene el experto.

Factores determinantes en las elecciones gallegas

Sea como fuere, los factores clave que determinarán el resultado final de estas elecciones gallegas son para Hidalgo, los siguientes:

  • Qué tan bien cada partido es capaz de resonar con los votantes y movilizar a sus respectivos partidarios
  • Su capacidad para ajustar estrategias en respuesta a las tendencias en evolución.
  • El nivel de abstención, probablemente influirá decisivamente en el resultado electoral.

De un modo u otro, "se entiende que las elecciones gallegas de 2024 se perfilan como un escenario indefinido e impredecible. Sin embargo, las encuestas son sólo los primeros datos, y el producto final dependerá de cuán hábiles y receptivos resulten ser los distintos actores políticos", concluye el experto.