La alimentación consciente o 'mindful eating' va más allá de la comida o la cocina. Comer es algo más que alimentarnos y se convierte muchas veces en un momento de descanso y disfrute, sobre todo cuando estamos pendiente de cómo comemos. ¿Os acordáis de lo buena que estaba tortilla de patatas que hicimos ayer? ¿Y esa pizza casera tan rica del otro día?

Realmente todos los días, absolutamente todos los días y en cada comida -y no solo en ocasiones especiales o cuando vamos de restaurantes-, podemos "practicar" la alimentación consciente. Incluso en el desayuno o en la merienda.

"Es importante comer nutricionalmente lo que necesitamos, llevando una dieta saludable, pero también disfrutar de ésta, de esa emoción positiva que nos da la comida,.Y esto es precisamente de lo que trata la alimentación consciente: disfrutar de cada comida con atención plena a ella, a los sabores, a las texturas... Ese placer nos va a hacer además, comer más saludable y nos va a llevar también, a preparar mejor los platos", explica a laSexta.com Laura Isabel Arranz(@lauragananutricion), doctora en Alimentación y Nutrición.

Se trata de procurar que el momento de las comidas sea un momento agradable, en el que prestemos atención a lo que comemos, a cómo lo comemos.

Es decir, "no se puede comer de cualquier forma ni cualquier cosa (salvo en ocasiones puntuales que lo requieran, lógicamente), pero es importante que sepamos lo que estamos comiendo, que lo tomemos disfrutando de esa preparación y de ese tiempo que tenemos para comer",añade Arranz, cuya filosofía de dieta lógica -tal como se llama su web- habla también de esto:

"Es importante comer disfrutando: el placer de comer es un instinto básico de supervivencia, por lo que es imprescindible que nuestros hábitos hábitos saludables impliquen disfrutar de la comida. Por ello, busquemos formas atractivas de preparar y presentar los alimentos para que ese momento de comer sea consciente y feliz".

Los beneficios de comer con atención plena

Por otro lado y como explican desde el centro Alimentación 3S (@alimentacion3s),en este artículo de su web, "existen diversos grados de conciencia alrededor de la experiencia de la comida, pero comer con atención plena o 'mindful eating' (comer con plena consciente) hace referencia a poner atención deliberadamente y sin juicios en el acto de comer, tomando conciencia de los alimentos que se comen, cómo, cuándo y por qué, siendo ésta la única manera de romper con automatismos, hábitos de inercia en la comida y el descontrol".

A priori -añaden los expertos de este centro- "parece únicamente una forma más saludable de experimentar la alimentación, pero la importancia de comer con atención plena reside en el alcance de sus beneficios".

Algunos de estos beneficios serían los siguientes:

  • Escuchar las señales de hambre física y las señales de saciedad para guiarnos cuándo debemos comenzar y parar de comer.
  • Poner el foco de atención en el acto de la comida, lejos de distracciones, comemos más lentamente, lo que favorece saciarnos con mayor rapidez.
  • Tomar conciencia y diferenciar entre las sensaciones de hambre física y el hambre emocional.
  • Experimentar con todos los sentidos los alimentos que comemos: sensaciones como la temperatura, la textura, el olor o el sabor.
  • Ayudarnos a conectar con el momento presente y, por lo tanto, pone pausa al bucle de ansiedad generado por la rutina diaria.

Experimentar con todos los sentidos los alimentos, que suelen pasar de forma totalmente desapercibida cuando comemos de forma automática (y sobre todo con prisas), sería especialmente útil "en adultos o niños/as que no les gusten ciertos alimentos porque ya les han puesto la etiqueta de 'no me gusta'", añaden los profesionales de este centro. En dicho artículo podéis leer más sobre esto.

El segundo de los beneficios que hemos enumerado anteriormente, es el de ayudarnos a comer más despacio. Como hemos comentado ya en otros artículos, comer despacio hace que no comamos de más, que tengamos una mejor saciedad -y por tanto que nos entre hambre tan rápido- y mejores digestiones.

Al comer con consciencia y con atención a la comida, evitamos también las con el móvil o incluso, con nuestras propias preocupaciones y por tanto, comeremos más despacio y masticaremos también más despacio, algo fundamental en las comidas. Por lo tanto, y según los expertos, "es importante masticar bien (y comer despacio) para conectar mejor con nuestras señales de saciedad".