CUIDADO CON LOS BULTOS
Un simple dolor de garganta podría ser señal de un cáncer
Sería uno de los primeros síntomas que podrían indicar que una persona padece un linfoma no Hodgkin.
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Un señor escocés de 60 años se despertó un día con un dolor de garganta. Creía que era algo menor, pero cuando acudió al médico le comentó su diagnóstico: le habían detectado un cáncer. Se trata del linfoma no Hodgkin, una enfermedad que supone el 3 % de los casos detectados de cáncer alrededor del mundo en un año.
Graeme Stirling pensó que su dolor de garganta se debía a los productos químicos que había utilizado el día anterior. Sin embargo, al tocarse la garganta notó un bulto en el cuello, así que decidió visitar a su médico de cabecera, comenta 'Daily record'.
Los médicos detectaron que el bulto de Stirling era un ganglio linfático inflamado, y un mes después le confirmaron que padecía el tipo de cáncer linfoma no Hodgkin. Esto ocurrió en 2020, por lo que, en plena pandemia, el paciente tuvo que esperar un mes hasta que le hicieron la biopsia.
Mientras esperaba al tratamiento, Stirling también desarrolló bultos en el área de la ingle. Después, el señor comenzó su tratamiento, que incluyó tres meses de quimioterapia, un trasplante de células madre y otro tratamiento adicional. A día de hoy, Stirling está sano y agradece el haber ido al médico a tiempo.
Qué es el linfoma no Hodgkin
El linfoma no Hodgkin es un cáncer en el tejido linfático que afecta a los glóbulos blancos o linfocitos, que normalmente ayudan a prevenir infecciones. La causa de esta enfermedad se desconoce, aunque comienza en un tipo de glóbulo blanco denominado linfocito B, según 'Medline Plus'.
Para la mayoría de pacientes no se encuentra una causa específica que justifique la aparición del linfoma no Hodgkin. Sin embargo, esta enfermedad se puede desarrollar en personas con sistemas inmunitarios debilitados, que hayan tenido un trasplante o padezcan VIH.
Con mayor frecuencia, el linfoma no Hodgkin afecta, sobre todo, a los adultos y más a los hombres. Existen muchos tipos de esta enfermedad, aunque una de las clasificaciones es en torno a la rapidez con la que se propaga.
El tratamiento de linfoma de Hodgkin varía dependiendo de cada paciente, así como su peso, estadio del cáncer y los síntomas que tenga. El tratamiento más común incluye quimioterapia e incluso un autotrasplante de células madre.
Por tanto, para detectar estas enfermedades es muy importante la autoexploración. Saber detectar cualquier anomalía o bulto es clave para detectar la enfermedad a tiempo. En caso de cualquier duda, la mejor opción siempre será acudir al médico para investigar el problema.
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