Genar Martí y Jorge Saucedo van hasta la casa de Neide Dias, tía de Antonio Anglés, quien accede a responder a unas preguntas de los periodistas, aunque asegura "no saber nada" del asesino de las niñas de Alcàsser. "Yo no sé nada y mi sobrina Kelly no quiere saber nada del tema. No le gustan los comentarios. No le gusta que se hable de este asunto", indica, a lo que añade que "ellos no quieren saber dónde está Antonio, ni si está vivo o muerto".

La madre de Anglés decía incluso, según Neide Dias, que "si la Policía que si lo encontraba, que lo mataran". "Eso dicen que ella contaba en televisión", expresa, tras lo que insiste en que ella no sabe si su sobrino "está vivo o muerto, porque no encontraron su cuerpo". "Solo sé que fue perseguido injustamente porque él no hizo nada. Yo creo que él no era malo", manifiesta.

En ese momento, una llamada telefónica interrumpe la entrevista. Es su hijo, quien le pide que no hable con los periodistas. "¡Por el amor de Dios! ¡No estés con ellos, no les hagas caso, no les digas nada!", reclama, a lo que añade: "No son de fiar; a ellos les da todo igual. No cuentes nada, mamá, por el amor de Dios. Metete en casa, por favor". Así, la mujer dice que no puede hablar y pide disculpas por "no haber podido colaborar mucho".