La firma italiana Ferrari cuida mucho su imagen y no quiere que cierto tipo de comportamientos se asocien a su marca, y por eso se permiten el lujo de vetar a famosos que, según ellos, rebajan el valor de sus coches. Esta noticia sorprende mucho a los zapeadores, entre ellos Quique Peinado que se cuestiona "cómo te puedes portar en la vida para que una marca no quiera que les des 300.000 euros en un coche".

La lista de vetos de Ferrari, sin embargo, es muy larga. Entre ellos, Justin Bieber, que perdió su coche durante dos semanas e incluso pensó que se lo habían robado, algo que no gustó a la marca, que vio esto como un acto de irresponsabilidad. También es el caso de Floyd Maywather, porque a Ferrari no le gusta su estilo de vida lleno de excesos y presumiendo en sus redes sociales. Otro famoso rechazado por Ferrari es Nicolas Cage, porque lo vendió por un precio inferior al que lo compró. Lo cierto es que esto de los vetos también lo hace Bugatti, que vetó Tom Cruise por no saber abrir la puerta de uno de sus coches.