Somos, junto con Grecia, ‘los reyes’ del paro entre los 178 países más desarrollados del mundo, según la Organización Internacional del Trabajo. La diferencia con los griegos es mínima, allí la tasa de paro es de 27,2% según datos de enero, y aquí de 27,16%.

Sólo una diferencia de 0,04%. Nadie en ese baremo tiene más desempleo que nosotros. Nadie. Ni en América, ni en Asia. Sólo países africanos como Kenia, Zimbabwe, Namibia o Burkina Faso nos ganan.

Otros como Nigeria están en el 23%, menos que España, pero hay que decir que allí los sistemas de medición no tienen nada que ver con los de aquí, en muchos casos sólo hacen estimaciones. En cualquier caso, la cifra es catastrófica. Y mejor no hablar del paro juvenil, porque ahí no nos gana ni Grecia.