El más tempranero de la semana fue un clásico, el rey del tuit incendiario, Tony Cantó comparaba la política lingüística catalana con la pederastia.  Punto para el diputado magenta, pero superado sólo horas después por otro titán del titular: Martínez-Pujalte.

El popular ha asegurado que algunos hipotecados quieren la dación en pago para comprarse otro piso. Bien, señor Pujalte, fino y sensible, que estos desahuciados son todos unos vividores. Parecíamos haber tocado techo y llega el ministro. Cañete recomendando duchas frías para ahorrar, se le olvidó añadir que es maravillo remedio para la piel de naranja y si lo hacemos en grupo, dejaremos contento a otro protagonista de la semana, el obispo de Alcalá.

El obispo asegura que sindicatos, partidos, la ONU, UNESCO  y el parlamento europeo conforman una conjura para mediante la ley del aborto, reducir la población mundial. Al principio me alarmé, las principales instituciones europeas conspirando para extinguir la raza humana, pero al escuchar al último protagonista de la semana lo entendí todo, el diputado vasco Emilio Olabarria. Asegura saber nombre de jueces y ministros que consumen droga. Esta afirmación tan sorprendente me explica una semana con tantos desatinos.