El papa popular y anticomunista
Las sombras de Juan Pablo II: de formar parte de los 'tres tenores' de la revolución conservadora a su complicidad con Pinochet
laSexta Columna analiza en este vídeo la controvertida figura del papa Juan Pablo II, desde su anticomunismo que le llevó a participar activamente en el fin de la URSS a la intrahistoria de su polémica foto con el dictador Augusto Pinochet.

En la historia de los papas, hay uno especialmente anticomunista: el polaco Juan Pablo II, que había sufrido la persecución de la dictadura soviética. Juan José Tamayo, doctor en Teología, explica que el papa llegó a convertir su rechazo al comunismo polaco "en una orientación política que va a intentar practicarlo a nivel universal".
De hecho, señala que en aquella época "se habló de los tres grandes tenores de la revolución conservadora de la década de los 80: El papa Juan Pablo II en el Vaticano, Ronald Reagan en la Casa Blanca y Margaret Thatcher, primera ministra de Inglaterra".
El excorresponsal de TV3 en el Vaticano, Vicenç Lozano, apunta que fue el propio papa el responsable del pacto entre Reagan y Lech Walesa, líder del sindicato Solidaridad en Polonia, que significó entregarle millones de dólares para que destruyera el régimen del general Jaruzelski en Polonia "y que, así como un juego de cartas, fueran cayendo el resto de los países de la órbita soviética hasta la caída del muro de Berlín y la autodestrucción de la propia URSS".
Un politizado papa muy querido con una imagen perfectamente construida en la que, según Lozano, "hubo cierta manipulación por parte de organizaciones ultraconservadoras, como los legionarios de Cristo, para propiciar un papa popular entre la gente joven".
Junto a esa imagen de cercanía también hubo sombras, como la imagen junto al sanguinario dictador Augusto Pinochet que para Tamayo es "demoledora" porque "es una forma de legitimar la dictadura". Sin embargo, el teólogo apunta que el pontífice "luego se arrepintió", si bien tuvo otros gestos de complicidad con el dictador.