Según el poeta y catedrático de literatura española, Luis García Montero, “estamos viendo los recortes que hay en Sanidad y en Educación. También vemos la puesta en peligro del sistema público de las pensiones”.

España proyecta una imagen muy desmejorada y algunos pensadores consideran que en estos momentos peligra uno de los grandes logros de la democracia, el Estado del bienestar. Es el caso del escritor Alvaro Pombo, actualmente enrolado en las filas de UPyD. “Todo eso se ha ido, no se sabe muy bien adónde. En este momento a mí sí que me parece que peligra el Estado del bienestar”.

"En este momento peligra el Estado del bienestar"

La periodista Victoria Prego, adjunta al director de El Mundo, prefiere hacer autocrítica y hablar de una crisis auto infringida. “El  Estado del bienestar hay que pagarlo, hay que tener con qué pagarlo y este es nuestro problema. Cuando lo volvamos a poder pagar, lo recuperaremos”.

Por su parte, el dramaturgo Albert Boadella intenta evitar el alarmismo y asegura que “esa idea de que papá Estado va repartiendo las cosas debe acabar”. El pensador catalán opina que “es una buena terapia. Hay una versión de esta situación que es la que dan los medios y hay otra que pertenece a la realidad. Lo que sucede no es tan grave como lo que se expande”.

"Si la clase media se empobrece el país se resquebraja"

En la línea del expresidente José María Aznar en su entrevista en Antena 3, Victoria Prego opina que “la clase media se está empobreciendo, y si la clase media se empobrece el país se resquebraja. Yo creo que lo que hay fundamentalmente es miedo al futuro, y eso es la primera vez que pasa en la historia de la democracia”.

Por último, el sociólogo Manuel Castells se pone en la piel del ciudadano y observa los realmente perjudicados en esta historia: “La  idea de que salimos todos juntos de la crisis es falsa, salen algunos y la mayoría no. La crisis se aprovecha para dar mucho miedo a la gente y que si no se aceptan cosas que antes no se aceptaban para imponer medidas que son impopulares, pero que se presentan demagógicamente como necesarias para salir de la crisis”.